Mercado de granos: el impacto de los aranceles de Trump en soja, trigo y maíz

El mercado de granos enfrenta un nuevo sacudón tras el anuncio de aranceles a las importaciones de acero y aluminio en Estados Unidos. A diferencia de episodios anteriores, en esta ocasión los mercados de productos agrícolas reaccionaron de manera dispar. Mientras que la soja y el trigo registraron caídas, el maíz logró mantenerse al alza, impulsado por una fuerte demanda internacional.
Maíz: un refugio frente a la incertidumbre
El maíz logró evitar el impacto negativo de los anuncios y cerró en alza para el mercado de granos, con una suba superior a un dólar y medio por tonelada. La Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) destacó que los futuros de maíz mostraron firmeza ante las nuevas amenazas arancelarias de Trump.

Según la entidad, los inversores están atentos al informe de oferta y demanda del Departamento de Agricultura de EE.UU. (USDA), que podría revelar un ajuste a la baja en los stocks finales del cereal en el mercado de granos. Además, la fuerte demanda externa reforzó el optimismo, con ventas significativas de maíz estadounidense a México y un volumen de inspecciones de exportación en el extremo superior de las expectativas del mercado.
En el mercado local, el maíz argentino mostró una mejora de 10 dólares por tonelada desde la eliminación de los derechos de exportación, superando ampliamente la suba de 3 dólares en Chicago. “La reducción impositiva implicaba una mejora de 5 dólares, por lo que hay una suba genuina en los precios”, explicó Dante Romano, especialista del Centro de Agronegocios y Alimentos de la Universidad Austral y fyo.
Asimismo, la performance exportadora argentina en el mercado de granos sigue fuerte. En enero se embarcaron 2,3 millones de toneladas de maíz, superando el promedio de 1,5 millones. A su vez, la demanda internacional sigue firme, con una cola de buques para cargar 1,7 millones de toneladas.

Soja y trigo bajo presión
En el caso de la soja, los futuros cerraron con leves bajas en una jornada volátil. del mercado de granos. La incertidumbre por los aranceles de Trump afectó las cotizaciones, aunque otros factores también incidieron. La mejora climática en Argentina, sumada a una cosecha mayor a la esperada en Brasil, presionó los precios.
A nivel local, el precio de la soja subió casi 20 dólares por tonelada, mientras que en Chicago se mantuvo estable. No obstante, la comercialización sigue en niveles históricos bajos. “Aún quedan más de 12 millones de toneladas de soja de la cosecha pasada sin vender, y en la nueva campaña estamos muy por debajo del promedio de ventas para esta época del año”, advirtió Romano.
El especialista destacó que los aceites han sido un factor de apoyo para la soja, con exportaciones de EE.UU. en alza debido a la demanda de India ante la suba del aceite de palma. Sin embargo, la volatilidad comercial sigue siendo un factor clave. “En solo una semana pasamos de imponer aranceles a pausarlos y luego a endurecer la política nuevamente”, señaló Romano.

Por su parte, los futuros de trigo iniciaron la semana con caídas, impactados por los temores de represalias comerciales tras el anuncio de Trump. A esto se suma la expectativa de que el informe del USDA muestre grandes existencias finales de trigo, lo que presiona a la baja los precios en el mercado de granos.
Además, las condiciones climáticas en las zonas productoras del Mar Negro y EE.UU. han mejorado, reduciendo el riesgo de daños por heladas. Aunque se espera la llegada de un frente frío, la capa de nieve pronosticada minimizaría los riesgos para los cultivos.
A futuro, el mercado de granos deberá prestar atención a las decisiones de siembra en EE.UU., donde la relación de precios podría generar una mayor superficie de maíz en detrimento de la soja, impactando en los valores relativos de ambos productos.
En Argentina, las lluvias recientes beneficiaron regiones clave del norte de Buenos Aires, sur de Entre Ríos y sur de Santa Fe, aunque el este de Córdoba sigue seco. En los próximos 15 días se esperan nuevos frentes de tormenta en el centro y norte del país, lo que podría favorecer la evolución de los cultivos, aunque las precipitaciones serían limitadas en Buenos Aires y La Pampa.

En un contexto global de alta volatilidad para el mercado de granos, los productores deben evaluar los movimientos del mercado y los informes clave para definir su estrategia de comercialización y aprovechar oportunidades en un escenario desafiante.