Argentina concreta su primera exportación de nuez pecán a China y abre un nuevo capítulo comercial
La producción argentina de frutos secos sumó un acontecimiento trascendental con la primera exportación de 20 toneladas de nuez pecán al mercado chino, un destino considerado estratégico por su nivel de consumo y su potencial comercial. El operativo, verificado por el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA), representa un paso decisivo hacia la consolidación internacional de un cultivo en expansión.
Según informó el organismo sanitario, el cargamento consistió en nuez pecán variedad Pawnee, una de las más valoradas en el comercio global por su tamaño, sabor y rendimiento industrial. El producto fue acondicionado en un contenedor que ya tiene como destino final el Puerto de Ningbo, uno de los principales nodos de ingreso de alimentos en el gigante asiático, donde las nueces argentinas competirán en un mercado altamente demandante.
Control sanitario y nuevas oportunidades comerciales
Previo a la autorización del embarque, agentes del Centro Regional Entre Ríos del SENASA realizaron una exhaustiva verificación del lote exportado para confirmar el cumplimiento de los requisitos fitosanitarios exigidos por la Administración General de Aduanas de China (GACC). Estos protocolos fueron acordados en marzo de 2025, tras una negociación bilateral que habilitó el ingreso de frutos secos argentinos al país asiático.
El SENASA destacó que su intervención garantiza la sanidad e inocuidad del producto durante toda la cadena productiva, con el objetivo de cumplir no solo con los estándares internacionales sino también con las exigencias particulares del país comprador. Este aval sanitario permite que la Argentina ingrese a un mercado altamente competitivo y de enorme volumen, lo que podría habilitar futuros incrementos en los envíos.

Entre Ríos, el corazón de la producción pecanera del país
La provincia de Entre Ríos fue protagonista central de esta primera exportación, ya que concentra cerca del 60% de las hectáreas implantadas con nuez pecán a nivel nacional. Además, aporta alrededor del 50% de toda la producción del país, lo que la posiciona como la región de mayor peso en la cadena productiva de este fruto seco.
No obstante, el cultivo también tiene presencia creciente en otras provincias como Santa Fe, Buenos Aires, Catamarca, Tucumán, Salta y Misiones, entre otras zonas donde se desarrollan proyectos productivos asociados a su alta demanda internacional. La diversificación geográfica refleja el dinamismo del sector y el interés creciente por un cultivo que ha demostrado buena adaptación y rentabilidad.

Un cultivo contraestación clave para los mercados del hemisferio norte
Uno de los factores que fortalecen la competitividad argentina es su condición de productor contraestación respecto del hemisferio norte. En el país, la cosecha comienza en abril y alcanza su pico entre junio y julio, lo que permite colocar nueces frescas cuando los mercados del norte no están en plena producción. Esta ventana de oferta estratégica mejora los precios y refuerza el atractivo comercial de la nuez pecán nacional.
Actualmente, el 90% de la producción de nuez pecán se destina a la exportación, mientras que el 10% restante abastece el mercado interno en segmentos como panificados, confituras, chocolatería y consumo directo. La apertura del mercado chino, considerado el principal consumidor mundial de nuez pecán con cáscara, agrega un canal de enorme capacidad de absorción.

El comercio internacional del pecán, en crecimiento sostenido
En lo que va de 2025, el SENASA registró exportaciones por 920 toneladas de nuez pecán, tanto con cáscara como pelada. Los principales destinos fueron Lituania, Brasil, Federación Rusa, Turquía, Egipto, Arabia Saudita, España y Perú, mercados donde el producto argentino ha logrado posicionarse con buena aceptación.
La incorporación de China a este listado podría transformar la escala exportadora del sector. Con un consumo interno en expansión y un creciente interés por alimentos saludables, el mercado asiático representa una oportunidad de enorme magnitud para los productores locales.
Con este primer envío, Argentina confirma su capacidad de cumplir con los más altos estándares sanitarios y comerciales, y abre la puerta a un futuro de mayor inserción global para la cadena del pecán.
