Mercado de granos en alerta: geopolítica, clima y decisiones políticas
El mercado de granos global atraviesa semanas decisivas, con una combinación de factores que generan volatilidad y mantienen en vilo a productores, exportadores y analistas. La tensión geopolítica en Medio Oriente, un escenario climático mixto en el hemisferio norte y decisiones económicas clave en Argentina configuran un tablero cambiante donde el maíz, el trigo y la soja tienen caminos divergentes.
Geopolítica: el conflicto entre Irán e Israel agita los mercados
El reciente aumento de tensiones entre Irán e Israel reavivó el temor a una posible interrupción del comercio internacional en el estrecho de Ormuz, una vía marítima clave por la que transita aproximadamente un tercio del petróleo mundial. Este potencial bloqueo ya genera movimientos en los precios de la energía, con impactos indirectos sobre los costos logísticos y la producción agroindustrial global.
Dante Romano, profesor e investigador del Centro de Agronegocios y Alimentos de la Universidad Austral, explicó que “la tensión en Medio Oriente impacta especialmente en el mercado de granos, en especial el trigo, ya que esta región es un importante exportador”. Además, destacó que una posible suba en la mezcla obligatoria de biodiesel en Estados Unidos —junto con restricciones a beneficios fiscales para combustibles importados— podría aumentar la demanda de aceite de soja, fortaleciendo los precios.
El clima, con luces y sombras
A nivel climático, los cultivos del hemisferio norte se encuentran en una etapa clave para el mercado de granos. En Estados Unidos, la situación es favorable, aunque comienza a observarse una leve baja en las condiciones de la soja, justo cuando inicia su etapa de floración. “Lo que ocurra en julio será determinante”, advirtió Romano, quien subrayó que los pronósticos anuncian condiciones algo más secas.
En Brasil, en tanto, la cosecha de la safrinha de maíz avanza con lentitud, aunque se espera un repunte el próximo mes. Este incremento coincidiría con el pico de exportación de ambos países, lo que podría ejercer una presión bajista adicional sobre los precios internacionales, afectando directamente al maíz argentino.
Trigo: buena cosecha, pero con riesgos
El trigo también muestra signos de presión por el lado de la oferta en el mercado de granos. Las trillas avanzan en Estados Unidos, Europa y la región del Mar Negro, consolidando una cosecha global robusta. Sin embargo, tormentas en las planicies estadounidenses y sequías en zonas rusas aportan incertidumbre. En ese contexto, Romano explicó que los fondos especulativos, que estaban muy vendidos, reaccionan rápidamente ante cualquier señal de alerta con compras que impulsan los precios.
En Argentina: ventas de soja activas, pero el maíz preocupa
A nivel local del mercado de granos, la comercialización de soja tomó impulso. Según datos oficiales al 16 de junio, casi 2 millones de toneladas se vendieron con precio, alcanzando el 31% del total con precio fijo, en línea con los promedios históricos. Sin embargo, reportes más recientes sugieren que ese ritmo se habría desacelerado en los últimos días.
La situación en el mercado de granos es más delicada en el caso del maíz. La cosecha avanza con lentitud y preocupa la falta de capacidad de almacenamiento, en un contexto en el que comenzará a competir con el maíz brasileño en los mercados internacionales. A esto se suma la incertidumbre por el inminente aumento de los Derechos de Exportación (DEX), previsto para el 30 de junio: el maíz pasaría de tributar 9,5% a 12%, mientras que la soja saltaría de 26,5% a 33%.
“Si bien esta suba de retenciones ya está siendo descontada en los precios, circulan rumores sobre una posible postergación en el caso del maíz”, señaló Romano, lo que podría modificar las decisiones comerciales de los productores en los próximos días.
Un escenario de alta volatilidad en el mercado de granos
Con múltiples factores en juego —desde la tensión bélica en Medio Oriente hasta el comportamiento climático en las principales regiones productoras y la política fiscal argentina—, el mercado de granos enfrenta semanas cruciales. Las decisiones que se tomen en este período no solo impactarán en la rentabilidad de los productores, sino también en el posicionamiento de Argentina en el comercio global de alimentos.
La recomendación de los analistas es clara: monitoreo constante, prudencia en las decisiones comerciales y una mirada estratégica que contemple los cambios en tiempo real. La volatilidad será, por ahora, la única constante.
