Ganadería: la digitalización como motor de la producción en 2025


Durante décadas, hablar del campo argentino y de la ganadería era hablar de tradición, de esfuerzo y también de concentración. Grandes extensiones, grandes productores, grandes inversiones. Un mundo que parecía reservado a pocos, sostenido en una lógica donde el acceso a capital y tecnología marcaba la diferencia. Sin embargo, en los últimos años, un cambio silencioso comenzó a transformar esa realidad: la digitalización.

Lo que empezó como una tendencia global en la ganadería hoy atraviesa la frontera del agro local. Plataformas financieras, billeteras digitales, subastas online y modelos de inversión tokenizados están redefiniendo la manera en que se produce, se comercializa y se invierte en el sector. La tecnología no solo está haciendo más eficiente al campo, sino también más accesible.

Según el informe de Kings Research, el mercado global de agricultura digital superó los u$s 21.900 millones en 2023 y proyecta llegar a u$s 54.200 millones en 2031, con un crecimiento anual superior al 12%. Detrás de estas cifras hay un cambio de paradigma: la digitalización ya no es solo una herramienta productiva, sino un mecanismo de inclusión.

La FAO lo define con claridad: la inclusión financiera digital es clave para mejorar la productividad rural y reducir la brecha entre grandes y pequeños productores. Países como Brasil y Uruguay ya incorporaron billeteras agropecuarias y remates digitales como parte habitual de su operatoria. En Argentina, ese camino comenzó y avanza con fuerza.

Ganadería, tecnología, alambrados

Un nuevo ecosistema financiero para el campo y la ganadería

En la ganadería nuestro país, este proceso se ve reflejado en iniciativas que combinan innovación tecnológica con inclusión financiera. DeCampoPagos, la primera y única wallet agropecuaria de Argentina, es un ejemplo concreto de cómo la digitalización puede simplificar la vida del productor y, al mismo tiempo, abrir oportunidades. Hoy más de 2.500 empresas la utilizan para recibir fondos, emitir e-cheques, programar pagos y generar rendimientos automáticos, sin depender del sistema bancario tradicional.

A esto se suman los fideicomisos tokenizados, que permiten invertir en proyectos agropecuarios con montos accesibles. Modelos como Landtoken facilitan la participación de ahorristas individuales en proyectos antes reservados a grandes jugadores. Es una puerta abierta para que más personas formen parte del desarrollo productivo nacional.

Ganadería, Emilio Herz, deCampoaCampo

Democratizar el acceso, transformar la lógica

La digitalización del campo y la ganadería no es solo una cuestión tecnológica. Es un proceso de democratización real, donde productores, emprendedores e inversores individuales acceden a las mismas oportunidades. La tecnología actúa como un gran igualador: reduce intermediarios, mejora la transparencia y multiplica las posibilidades.

Del campo al futuro

La transformación digital del agro no es un fenómeno pasajero. Es el inicio de una nueva era donde la innovación redefine el negocio y la transparencia se convierte en valor agregado. El desafío ahora es consolidar un modelo donde la tecnología no reemplace al productor, sino que lo potencie.

Ganadería, Emilio Herz, deCampoaCampo

Porque la digitalización, lejos de alejar al hombre del campo, puede acercarlo a nuevas oportunidades para la ganadería. Y en esa convergencia entre tradición e innovación, el agro argentino tiene la chance de construir un futuro más inclusivo, competitivo y sostenible.

El campo siempre fue sinónimo de trabajo, esfuerzo y resiliencia. Hoy, a esas palabras se suma una nueva: inclusión. Y su motor es digital.

Fuente: deCampoaCampo