Canales de riego: la nueva frontera de la energía sostenible en Mendoza


Mendoza podría transformar sus canales de riego en generadores de energía limpia. Con más de 12.000 kilómetros de canales destinados al riego de viñedos y frutales, la provincia encuentra en estas corrientes una oportunidad para abastecer de electricidad a fincas, bodegas y viviendas cercanas. La innovación viene de la mano del ingeniero aeronáutico Mauro Grioni, becario posdoctoral del CONICET, quien desarrolla turbinas hidrocinéticas capaces de aprovechar el flujo constante de agua.

Turbinas hidrocinéticas: electricidad a partir del flujo del agua

El proyecto se centra en las THC, turbinas hidrocinéticas que convierten la energía cinética del agua en electricidad. Según Grioni, estos dispositivos pueden instalarse directamente en los canales sin grandes obras civiles, reduciendo costos y minimizando el impacto ambiental en comparación con represas o centrales hidráulicas tradicionales.

“Estos canales, mayormente destinados al riego de cultivos y viñedos, podrían utilizarse para abastecer la demanda energética de bodegas, fincas y viviendas cercanas”, afirma el investigador. Además, el aprovechamiento del flujo continuo de los canales de riego permite una generación de energía estable durante todo el año, aprovechando un recurso que hasta ahora se utilizaba únicamente para riego.

Canales de Riego

Innovación inspirada en la aeronáutica

Una de las claves del diseño de Grioni son los winglets aplicados a los álabes de las turbinas, tomados del mundo aeronáutico, que mejoran la eficiencia aerodinámica y aumentan el rendimiento del flujo de agua. Estos dispositivos permiten reducir la turbulencia y aprovechar más energía de cada litro de agua que pasa por la turbina, lo que se traduce en una generación eléctrica más constante y eficiente.

“Los winglets son una innovación de la aeronáutica que permitió que las aeronaves mejoren su rendimiento. En las THC, se espera que generen aumentos significativos en eficiencia”, explica Grioni. La incorporación de estas tecnologías demuestra cómo la ingeniería aeronáutica puede aplicarse a sistemas de energía renovable terrestre.

Canales de Riego

Ensayos y prototipos: del laboratorio al canal

Tras validar el diseño mediante simulaciones de dinámica de fluidos, el equipo trabaja en la construcción de un prototipo para ensayos reales en un canal de Mendoza. El desafío consiste en adaptar cada turbina a la velocidad y caudal del agua en distintos tramos de la red de riego, garantizando que funcionen de manera robusta bajo diferentes condiciones.

La fase de prototipo de los canales de riego permitirá evaluar el rendimiento energético, identificar ajustes necesarios y optimizar la replicabilidad del sistema en distintos canales de la provincia. Los investigadores esperan que los primeros ensayos confirmen la viabilidad de una instalación escalable que pueda abastecer no solo fincas y bodegas, sino también zonas residenciales cercanas.

Proyección y potencial replicable

Aunque la iniciativa de los canales de riego se concentra en Mendoza, su diseño es adaptable a otras regiones de Argentina e incluso a corrientes marinas costeras. “El diseño de las THC puede adaptarse para operar en otras regiones con características similares”, señala Grioni.

Canales de Riego

La flexibilidad del sistema sugiere que los canales de riego podrían convertirse en un modelo replicable de generación de energía limpia a nivel nacional e internacional, especialmente en zonas agrícolas con redes de riego extensas. Esto abre la posibilidad de diversificar la matriz energética de manera descentralizada y sostenible.

Energía limpia y desarrollo sostenible

La propuesta llega en un contexto de creciente demanda de energías renovables y diversificación de la matriz energética argentina. Transformar los canales de riego en motores de electricidad sostenible no solo aporta al agro, sino también a las comunidades locales y a la mitigación del impacto ambiental.

El proyecto de los canales de riego refleja cómo la innovación tecnológica puede aprovechar recursos existentes de manera eficiente y sustentable. Los canales que riegan los cultivos de Mendoza podrían convertirse, además, en fuentes confiables de energía que contribuyan a un modelo de agro más resiliente y verde. La iniciativa también apunta a fomentar el desarrollo de capacidades locales en ingeniería y energías renovables.