Fin del sueño: Boca empató con Auckland City y quedó eliminado del Mundial de Clubes 2025
Boca Juniors se despidió del Mundial de Clubes 2025 con un sabor amargo. El empate 1-1 ante Auckland City y la sorpresiva victoria de Benfica sobre Bayern Múnich por 1-0 sentenciaron la eliminación del conjunto argentino en la fase de grupos del Grupo C. El Xeneize cerró su participación sin victorias, con dos empates, y lejos de las expectativas depositadas en el torneo internacional que se disputa por primera vez con 32 equipos en Estados Unidos.
El equipo dirigido por Miguel Ángel Russo llegaba al encuentro en Nashville con una misión complicada: necesitaba golear al débil conjunto neozelandés y esperar una victoria de los alemanes frente a Benfica. Ninguna de las dos condiciones se cumplió, y Boca se despidió del certamen en la primera fase.
Un inicio con intensidad, pero sin contundencia
Desde el pitazo inicial, Boca intentó imponer condiciones. Con una formación ofensiva, donde sobresalieron Exequiel Zeballos por la derecha y Lautaro Blanco por izquierda, el equipo argentino buscó abrir rápidamente el marcador. Sin embargo, pese a dominar el juego territorialmente y llenar de centros el área rival, le costó generar situaciones claras.
El primer golpe para el equipo de La Ribera llegó a los 23 minutos, cuando Zeballos —el más desequilibrante hasta ese momento— sintió una molestia física y tuvo que ser reemplazado por Kevin Zenón. Pese a la modificación, Boca mantuvo el esquema ofensivo con un 4-1-3-2 bien marcado.
El premio al esfuerzo llegó a los 25′: tras un córner desde la izquierda, Nicolás Di Lollo ganó de cabeza, la pelota pegó en el palo y rebotó en la espalda del arquero Conor Garrow, quien convirtió en contra el primer gol del partido. Era el 1-0 parcial que le daba algo de esperanza al equipo argentino.
Oportunidades desperdiciadas y un empate letal
El cierre de la primera mitad mostró a un Boca más punzante, con Palacios y Merentiel exigiendo desde afuera del área. Sin embargo, la fortuna no estuvo de su lado: ambos remates dieron en el travesaño y evitaron un segundo gol que pudo haber cambiado el desarrollo del encuentro.
Ya en el segundo tiempo, Auckland City aprovechó una de las pocas chances que tuvo. A los 49 minutos, Gray le ganó de cabeza a Battaglia tras un córner y anotó el 1-1. Fue el primer gol del conjunto neozelandés en todo el torneo, y un golpe duro para las aspiraciones de Boca.
Poco después, a los 54′, el partido fue interrumpido por una alerta meteorológica en Nashville debido a una tormenta eléctrica. Durante más de 30 minutos, el juego estuvo detenido mientras en otro estadio, Benfica concretaba su triunfo sobre Bayern Múnich, sellando así la suerte de Boca antes del regreso al campo.
Sin margen de reacción y con VAR en contra
Con el panorama definido, Boca intentó buscar la victoria como acto de orgullo. Logró marcar un segundo tanto a través de Miguel Merentiel, pero el VAR detectó una mano previa de Zenón y el gol fue anulado. Garrow, el arquero de Auckland, se convirtió en figura en los minutos finales, tapando varios intentos y sosteniendo el empate.
De esta forma, el Xeneize se despidió del Grupo C sin triunfos. En la tabla final, Bayern Múnich y Benfica avanzaron a octavos de final, mientras que Boca y Auckland quedaron eliminados. Fue un cierre frustrante para un equipo que llegó con expectativas altas, pero no logró plasmarlo en resultados.
El balance
El Mundial de Clubes 2025 era una oportunidad única para que Boca compitiera en un plano internacional renovado, con más equipos y visibilidad global. Sin embargo, la eliminación prematura obliga a replanteos. El equipo mostró actitud, pero pagó caro la falta de eficacia y la fragilidad defensiva en momentos clave.
Ahora, Boca deberá volver a enfocarse en sus compromisos locales y en la Copa Libertadores, donde aún mantiene chances de competir por un título internacional. Pero la ilusión de conquistar el mundo deberá esperar.
