SENASA refuerza las medidas para prevenir zoonosis en la producción animal


Las zoonosis son enfermedades que se transmiten de animales a personas, ocasionadas por bacterias, virus, parásitos u hongos, y pueden propagarse por contacto directo, a través del ambiente, por el agua o mediante alimentos contaminados. Ante este escenario, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA) reiteró la necesidad de reforzar las medidas de prevención en unidades productivas, establecimientos de faena y áreas rurales. El objetivo es claro: proteger la sanidad animal, garantizar la inocuidad alimentaria y resguardar la salud pública, evitando la propagación de patologías de alto impacto.

Bioseguridad: la primera barrera de prevención

El organismo apuntó a la bioseguridad como el primer eje estratégico contra las zoonosis. Este conjunto de acciones incluye controlar el ingreso de personas, vehículos y animales a los establecimientos, además de asegurar la desinfección de equipos y herramientas de trabajo.

Asimismo, el protocolo contempla la implementación de cuarentenas para los animales recién incorporados y el manejo adecuado de plagas y fauna silvestre, que pueden actuar como vectores o reservorios de agentes infecciosos. Según SENASA, estos pasos reducen notablemente la probabilidad de que ingresen patógenos a los sistemas productivos.

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Sanidad animal y vacunación: pilares del control preventivo

El segundo eje destacado por SENASA contra las zoonosis se vincula con la sanidad animal, donde la vacunación obligatoria y la desparasitación periódica cumplen un rol central. Mantener rodeos sanos permite reducir los riesgos de transmisión tanto dentro de los establecimientos como hacia las personas que trabajan en ellos.

La vigilancia sanitaria constante también forma parte de este esquema, ya que posibilita detectar a tiempo signos clínicos, cambios en el comportamiento o alteraciones productivas que puedan estar asociadas a enfermedades zoonóticas.

Manejo y bienestar animal para reducir riesgos

Las buenas prácticas de manejo representan el tercer pilar del enfoque preventivo contra las zoonosis. Garantizar una alimentación adecuada, provisión de agua limpia y condiciones de alojamiento correctas reduce el estrés y fortalece la respuesta inmunológica de los animales.

Otro punto clave es la eliminación segura de desechos y cadáveres, práctica que evita la proliferación de microorganismos patógenos en el entorno productivo y disminuye las posibilidades de contagio entre animales y personas.

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Capacitación del personal rural: una pieza fundamental

SENASA subrayó la importancia de que el personal cuente con equipos de protección individual y reciba capacitación continua sobre las principales zoonosis. Conocer los protocolos de actuación ante incidentes o exposiciones es esencial para minimizar riesgos.

El organismo también destacó la necesidad de realizar controles médicos periódicos en trabajadores rurales, por su alta exposición a animales y materiales potencialmente contaminados.

El quinto eje remarcado por SENASA es la vigilancia epidemiológica, encargada de detectar, monitorear y responder ante posibles brotes. Para ello es indispensable mantener registros actualizados sobre movimientos animales, vacunaciones, ingresos y egresos del establecimiento. Este sistema permite actuar con mayor eficacia ante cualquier situación sospechosa y fortalecer los programas sanitarios en cada región.

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Zoonosis prioritarias: hidatidosis y brucelosis

Entre las enfermedades de mayor relevancia sanitaria, SENASA recordó la hidatidosis, causada por Echinococcus granulosus. Para prevenirla, recomendó desparasitar periódicamente a los perros y evitar alimentarlos con vísceras crudas o restos de faena, que deben eliminarse correctamente.

La otra enfermedad destacada es la brucelosis, que afecta a bovinos, ovinos, caprinos y porcinos. Puede transmitirse al humano por alimentos sin pasteurizar o por contacto con secreciones de animales infectados. Por eso, el organismo reiteró la necesidad de vacunar a las terneras de 3 a 8 meses y de determinar el estatus sanitario mediante la DOES.

Finalmente, SENASA recordó que la prevención de las zoonosis requiere del compromiso de productores, trabajadores y organismos oficiales. La detección temprana, la notificación oportuna y el cumplimiento de las medidas sanitarias son claves para resguardar la salud animal, humana y ambiental.