La yerba mate mantiene su dinamismo y supera los 860 millones de kilos procesados


El sector yerbatero argentino continúa mostrando signos de estabilidad y crecimiento sostenido, según el último informe del Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM). Entre enero y septiembre de 2025, se procesaron 863.566.554 kilogramos de hoja verde, consolidando a esta cadena agroindustrial como una de las más relevantes del país.

Aunque el volumen total representa un descenso respecto del año anterior —cuando se alcanzaron casi 969 millones de kilos en el mismo período—, el comportamiento productivo refleja una cosecha sólida y una industria capaz de sostener la demanda tanto interna como externa.

Consumo interno firme y preferencia por formatos tradicionales

El consumo interno de yerba mate se mantiene estable. En septiembre de 2025, el volumen de yerba elaborada a salida de molino alcanzó los 23.200.203 kilogramos, sumando un total acumulado de 207.103.486 kilos en los primeros nueve meses del año.

El INYM destaca que este indicador es el más cercano al comportamiento de la yerba mate en góndola, ya que incluye envíos a centros de distribución, mayoristas y supermercados, ofreciendo así una foto precisa de la demanda del consumidor final.

Yerba mate, yerba

En cuanto a los hábitos de consumo, el formato de medio kilo sigue siendo el favorito, con una participación del 56,65% del total de salidas de molino. Le siguen los paquetes de un kilo, con 37,69%, y los de dos kilos, con 1,79%. En conjunto, los envases de medio kilo y un kilo representan el 94,34% de las ventas hacia el mercado interno, consolidando la preferencia por formatos tradicionales y prácticos.

Exportaciones en crecimiento sostenido

La yerba mate argentina no solo mantiene su fortaleza en el mercado interno, sino que también continúa consolidando su presencia internacional. Entre enero y septiembre de 2025, las exportaciones alcanzaron 41.954.076 kilogramos, con 7,25 millones de kilos enviados solo en septiembre, lo que marca un incremento respecto del mes anterior.

Los destinos de exportación incluyen principalmente países de América Latina, Estados Unidos y Europa, donde la yerba mate sigue ganando reconocimiento por sus propiedades nutricionales y su creciente popularidad en el segmento de bebidas naturales y saludables.

Yerba mate

Una cadena estable pese a las fluctuaciones productivas

El sector yerbatero se consolida como una de las cadenas agroindustriales más estables del país, con un flujo constante tanto en el mercado interno como en el externo. Los especialistas destacan que, a pesar de las fluctuaciones productivas anuales que pueden influir en la cosecha, la industria logra mantener niveles de consumo y exportación consistentes, gracias a su organización, planificación y adaptación a la demanda.

El informe del INYM también subraya la importancia de la modernización de los molinos y el control de calidad, elementos que permiten sostener el prestigio de la yerba mate argentina en los mercados internacionales y garantizar la satisfacción del consumidor local.

Yerba mate

Perspectivas y desafíos para el sector

Aunque la producción muestra cifras sólidas, los analistas señalan que el sector deberá continuar trabajando en mejorar la competitividad, optimizar los procesos de industrialización y ampliar su capacidad exportadora. La demanda interna permanece firme, pero la posibilidad de incrementar el consumo y diversificar mercados externos será clave para sostener el crecimiento a largo plazo.

Además, la consolidación de formatos tradicionales y la fidelidad de los consumidores locales brindan una base estable sobre la cual planificar inversiones y estrategias de marketing. Por su parte, las exportaciones sostenidas permiten al sector proyectar ingresos adicionales, reforzando su relevancia en la economía regional y nacional.

En conclusión, la yerba mate argentina mantiene su dinamismo productivo y comercial, con más de 860 millones de kilos cosechados y un mercado interno robusto que respalda la tradición de consumo. A la par, las exportaciones muestran un crecimiento sostenido, consolidando al sector como un pilar estable de la agroindustria argentina y un actor relevante en el mercado global de bebidas naturales.