WhatsApp dejará de funcionar en celulares Android antiguos desde 2026
A partir del 1 de enero de 2026, WhatsApp dejará de ser compatible con ciertos celulares Android, debido a los nuevos requisitos de seguridad y software que la aplicación de Meta implementará. Los dispositivos que no puedan actualizarse a Android 5.0 o versiones superiores perderán la posibilidad de instalar, actualizar o utilizar la aplicación, lo que derivará en la pérdida de acceso a conversaciones, archivos y funciones.
La compañía ya no ofrecerá soporte ni parches de seguridad para estos modelos, limitando las opciones de comunicación para quienes no migren a dispositivos compatibles y aumentando la vulnerabilidad de los datos personales almacenados en los equipos más antiguos.
Modelos afectados por la actualización
El recorte de compatibilidad impacta principalmente en teléfonos que no pueden actualizarse a Android 5.0. Entre los modelos identificados se encuentran Samsung Galaxy S4, Samsung Galaxy Ace 4, LG Optimus L3 II, Sony Xperia M, Huawei Ascend Mate y HTC Desire 500.
Además, la restricción de WhatsApp alcanza a todos los dispositivos lanzados antes de 2014 que no recibieron actualizaciones posteriores de sus fabricantes. La lista podría ampliarse e incluir variantes regionales o marcas menos conocidas, siempre que el sistema operativo se mantenga por debajo del umbral requerido. Esto implica que la capacidad de recibir nuevas funciones y actualizaciones de seguridad quedará bloqueada, acelerando la obsolescencia de estos dispositivos.
Por qué WhatsApp deja de ser compatible
Cada actualización de WhatsApp incorpora funciones avanzadas y mejoras de seguridad que demandan mayor capacidad de procesamiento y versiones recientes del sistema operativo. Los dispositivos que ya no reciben soporte oficial de sus fabricantes no pueden garantizar un funcionamiento adecuado ni proteger los datos personales de los usuarios.
Mantener la compatibilidad con sistemas obsoletos limita la innovación y complica el desarrollo de la plataforma. Por ello, WhatsApp concentra sus recursos en dispositivos que cumplan los requisitos técnicos actuales, asegurando una experiencia estable y segura.
Consecuencias de la pérdida de compatibilidad
Cuando un teléfono deja de ser compatible con WhatsApp, el usuario no puede instalar actualizaciones ni acceder a nuevas funciones, y eventualmente la aplicación deja de funcionar por completo. Esto afecta la mensajería, el acceso a archivos multimedia y la recuperación de conversaciones previas.
Además, la falta de soporte aumenta la exposición a fallos de seguridad y posibles ataques. La comunicación con contactos habituales se complica, dado que WhatsApp sigue siendo la aplicación de mensajería predominante en Argentina y muchos otros países.
Qué hacer para no perder información
La primera medida recomendada es realizar una copia de seguridad de los chats antes de que la aplicación deje de funcionar. En Android, esto se realiza desde el menú de configuración de WhatsApp, seleccionando la opción de copia hacia Google Drive. En iPhone, las copias se guardan en iCloud. De esta forma, los archivos y conversaciones se podrán recuperar al instalar la aplicación en un nuevo dispositivo.
También conviene verificar si el teléfono permite actualizarse a un sistema operativo compatible, ya que algunas marcas publican actualizaciones incluso para modelos antiguos. Si esto no es posible, la opción más segura es adquirir un dispositivo nuevo, reinstalar WhatsApp y restaurar la copia de seguridad.
Alternativas si no se cambia de celular
Si el usuario decide no renovar su equipo, puede explorar otras aplicaciones de mensajería compatibles con su sistema operativo. Sin embargo, la adopción de alternativas es limitada debido a que la mayoría de los contactos utiliza WhatsApp, por lo que mantener la comunicación requiere informar a los contactos sobre el cambio de aplicación o número.
En resumen, a partir de 2026, la continuidad de WhatsApp estará condicionada a la actualización del sistema operativo o a la renovación del dispositivo. Los usuarios que no se adapten deberán enfrentar la pérdida de acceso a la plataforma y considerar alternativas para seguir conectados.
