Trigo 2025/26: con el mejor perfil hídrico en años, Argentina proyecta una campaña prometedora


La campaña de trigo 2025/26 arranca en Argentina con un escenario excepcional: se trata del mejor perfil hídrico de los últimos cuatro años, lo que permitirá al cereal desplegar su máximo potencial productivo. A pesar de los excesos de agua registrados en algunas zonas, el cultivo se perfila para consolidar una de las campañas más prometedoras de la última década, según el último informe de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR).

Todos los detalles de la campaña actual del trigo

El reporte técnico del trigo destaca que, aunque las abundantes lluvias obligaron a realizar algunos ajustes, la superficie estimada para la siembra se mantiene en niveles históricamente altos. Inicialmente se proyectaban 7,2 millones de hectáreas, la mayor desde 1982, pero los anegamientos en regiones clave llevaron a recortar esa cifra a 7,1 millones. Aun así, el volumen estimado de producción sigue siendo alentador: 20,7 millones de toneladas, calculado con un rinde promedio nacional de 30,5 quintales por hectárea y considerando 300.000 hectáreas que podrían no cosecharse.

“El trigo 2025/26 muestra el mejor potencial de los últimos cuatro años”, resalta la BCR, aludiendo a las condiciones hídricas ideales en la mayor parte del país. A diferencia de campañas anteriores marcadas por la sequía o la falta de reservas en los perfiles del suelo, esta vez la humedad abunda, lo que genera un escenario propicio para una implantación sólida del cultivo.

Trigo

Sin embargo, la campaña del trigo no está exenta de complicaciones. El exceso de agua, si bien positivo desde el punto de vista agronómico, dificulta las labores en el campo. En zonas como Pergamino, el sureste de Santa Fe y Entre Ríos, los trabajos de siembra avanzan con lentitud debido al barro y la alta humedad en los suelos. Hasta el momento, el avance nacional de siembra alcanza el 23 %, por debajo del 29 % que suele registrarse en esta etapa del año.

“La humedad complica el ingreso de maquinaria a los lotes, y las sembradoras tienen dificultades para operar debido al rastrojo acumulado”, explicaron desde la BCR. Los productores, por su parte, muestran cierta preocupación: un agravamiento del estado de los caminos rurales podría obstaculizar la siembra de materiales de ciclo largo o intermedio, claves para alcanzar altos rendimientos para el trigo.

clima, campo, Trigo, cosecha, evasión fiscal, agricultura

A pesar de estas dificultades puntuales, el panorama general es alentador. A diferencia de años anteriores, en los que la falta de agua fue un condicionante extendido, este año las zonas con déficit hídrico son acotadas y geográficamente delimitadas. El caso más representativo es Santiago del Estero, donde la siembra se detuvo temporalmente en espera de nuevas lluvias que permitan continuar con los trabajos.

Otra señal positiva es el crecimiento de la superficie sembrada en diversas regiones del país. La zona centro-norte registra un aumento del 2,9 % en comparación con el ciclo anterior, y algunas provincias muestran incrementos más marcados. Córdoba, por ejemplo, lidera el crecimiento interanual con un alza del 9,3 % en la superficie triguera, impulsada por la necesidad de sostener rotaciones agrícolas con gramíneas. Le sigue Santa Fe, con un aumento del 3,6 %. En tanto, Buenos Aires, afectada por los excesos hídricos, ajustó a la baja su superficie en 100.000 hectáreas, aunque mantendrá niveles similares a los del año pasado.

Trigo

En síntesis, la campaña de trigo 2025/26 comienza con perspectivas alentadoras. Si bien persisten desafíos logísticos y climáticos que podrían condicionar el ritmo de siembra, la base hídrica sólida y la expansión de la superficie implantada configuran un escenario inmejorable para que el cereal se afiance como uno de los pilares productivos del agro argentino en el ciclo que comienza.