Los terneros marcan el ritmo del mercado de Invernada en este 2025

El mercado de invernada está atravesando un momento excepcional con los terneros picando en punta. Lejos de la lógica estacional que históricamente rige los precios de los terneros —donde el pico de oferta entre marzo y junio suele provocar una caída de los valores— este 2025 se destaca por una tendencia completamente opuesta: los precios siguen subiendo, impulsados por una demanda firme, buena disponibilidad de forraje y condiciones climáticas favorables.
Según datos del Rosgan (Mercado Ganadero de Rosario), en abril los precios del ternero ya habían alcanzado un valor promedio de $3.676 por kilo vivo, un salto de casi $1.000 respecto a la misma época del año pasado. Pero el dato más sorprendente llegó en junio: el precio promedio alcanzó los $3.709 por kilo, consolidando un incremento del 15% respecto a enero.
Demanda sólida y los terneros protagonistas del cambio
Lo notable de esta suba es que no se debe a una reducción en la oferta, como ha ocurrido en otros años, sino a una demanda particularmente activa, que está empujando los valores en un contexto de abundancia de terneros en el mercado.

“La diferencia clave es que esta vez el aumento de precios está originado por un mayor interés comprador, y no por restricciones de oferta. Esto da lugar a un escenario mucho más saludable para toda la cadena ganadera”, señala el informe del Rosgan.
Detrás de esta demanda firme hay varios factores. El primero es la excelente disponibilidad de pasto en buena parte del país, gracias a un clima benévolo que favoreció la producción forrajera. Esto permite a muchos invernadores sostener o incluso ampliar sus planteos de recría a campo, lo que aumenta su disposición a pagar precios más altos por la reposición.
El segundo factor es la confianza del productor en el negocio ganadero. Luego de años de incertidumbre, la combinación de buenos precios, perspectivas estables y medidas oficiales que no alteran drásticamente las reglas del juego está alentando a muchos actores a invertir en terneros, apostando a una campaña de engorde más ambiciosa.

Que los precios suban durante la zafra —cuando se concentra la mayor oferta del año— no es algo común. De hecho, en los últimos 15 años solo se registraron comportamientos similares en dos ocasiones, siendo la más reciente en 2020, cuando el aumento fue impulsado por un contexto de alta inflación y búsqueda de refugio de valor en activos físicos, como el ternero.
En aquella oportunidad, el empuje fue más especulativo. En cambio, en 2025 el mercado muestra fundamentos reales detrás de la suba, lo que refuerza la percepción de que este buen momento puede sostenerse en el tiempo.
¿Qué puede pasar con el Mercado de Invernada en los próximos meses?
Si bien la oferta de terneros empezará a disminuir naturalmente con el cierre de la zafra, el mercado podría seguir mostrando precios firmes si se mantiene esta combinación de factores positivos: buena disponibilidad de pasto, clima favorable y continuidad en la demanda.

Además, el buen ánimo en el sector podría volcarse en inversiones en genética, sanidad y manejo, lo que a mediano plazo elevaría aún más la calidad del rodeo nacional.
Por el lado de los riesgos, habrá que seguir de cerca la evolución del mercado internacional de carne y la situación macroeconómica local, especialmente en lo que refiere al tipo de cambio, costos de alimentación y políticas impositivas. No obstante, por ahora el panorama es alentador.

La firmeza en el precio del ternero durante plena zafra no solo rompe con la estacionalidad habitual, sino que también renueva el optimismo entre los productores ganaderos. Tras años de incertidumbre y márgenes ajustados, muchos ven en este 2025 una verdadera oportunidad para afianzar el crecimiento del negocio.
“Lo que estamos viendo es el resultado de una conjunción de factores positivos, que si se mantienen pueden marcar el inicio de un nuevo ciclo virtuoso para la ganadería argentina”, concluye el Rosgan.