San Lorenzo venció a Deportivo Riestra 1-0 por el Torneo Clausura


En una jornada tan intensa en la cancha como en los despachos, San Lorenzo superó 1-0 a Deportivo Riestra en el inicio de la fecha 14 del Torneo Clausura. El triunfo, celebrado en el Nuevo Gasómetro, no solo le permitió al conjunto azulgrana meterse en zona de play-offs y seguir soñando con la clasificación a la Copa Sudamericana 2026, sino que llegó en medio de un clima político y dirigencial convulsionado.

Un triunfo necesario en el Bajo Flores

San Lorenzo salió decidido a imponer condiciones ante un Riestra que, fiel a su estilo, se mostró sólido, ordenado y a la espera del error rival. En un primer tiempo cerrado, las emociones escasearon, aunque el local mostró una leve superioridad territorial. La primera llegada clara fue a los 20 minutos, cuando Alexis Cuello fue habilitado dentro del área y definió ante Arce, que respondió con una gran atajada. En el rebote, el delantero intentó de cabeza, pero la pelota se fue por encima del travesaño.

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Poco después, el arquero visitante volvió a lucirse ante un disparo de Gulli, mientras que Riestra respondió con una falta de Romaña sobre Díaz al borde del área: el tiro libre de Herrera obligó a Gill a intervenir con seguridad. El Malevo, que venía de nueve partidos sin perder, demostró que su crecimiento no era casualidad y complicó con su presión y pelota parada.

El complemento mantuvo el equilibrio hasta que un chispazo cambió la historia. A los 61 minutos, una corrida de Báez por derecha y la asistencia precisa de Ladstatter derivaron en una media tijera espectacular de Cuello, que estampó el 1-0 con un golazo. El estadio estalló y el delantero coronó su mejor actuación con un festejo que simbolizó el desahogo colectivo de un equipo necesitado de resultados.

De ahí en adelante, San Lorenzo se dedicó a controlar el ritmo del juego, ante un Riestra que perdió claridad y profundidad. Con el pitazo final, el local se abrazó a una victoria que devuelve aire en medio de la turbulencia institucional.

Fuego cruzado en Ezeiza

Horas antes del partido, el club vivió un episodio de alta tensión política. En el predio de Ezeiza, el presidente de la AFA, Claudio “Chiqui” Tapia, reunió a gran parte de la dirigencia azulgrana para exigir una posición clara respecto de los rumores sobre un eventual avance hacia un modelo de Sociedad Anónima Deportiva (SAD).

Tapia fue tajante: recordó que el estatuto y la normativa vigente no habilitan la figura de SAD en el fútbol argentino y advirtió que, de mediar una intervención de la Inspección General de Justicia (IGJ), San Lorenzo podría ser desafiliado. Según trascendió, el mandatario dio plazo hasta después del fin de semana para que la Comisión Directiva presente una definición institucional y una solución interna.

La presencia de Matías Lammens —ex presidente del club entre 2012 y 2019— reavivó viejas diferencias. El dirigente Manuel Agote, molesto por compartir mesa con Lammens y el actual titular Marcelo Moretti, abandonó la reunión en medio de gritos y acusaciones de “traidor”. Minutos después, Pablo García Lago, ex secretario y vocal, intentó agredir físicamente a Moretti, lo que obligó a intervenir a otros directivos para evitar mayores incidentes.

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La reunión se prolongó por una hora y contó con la participación de nombres históricos de la vida política del club, entre ellos Néstor Ortigoza, Horacio Arreceygor, Sergio Costantino, Pablo Levalle y Belén Lugones, entre otros.

Mientras el equipo de fútbol intenta recomponer su presente deportivo, el club vive una de sus semanas más agitadas en los últimos años. El triunfo ante Riestra trajo algo de alivio en el plano futbolístico, pero la dirigencia deberá ahora ordenar el tablero político y definir una postura clara frente al reclamo de Tapia.

Con los tres puntos en el bolsillo y el futuro institucional en debate, San Lorenzo respira, pero no descansa. El domingo será otra prueba, dentro y fuera de la cancha.