San Lorenzo: AFA avala una comisión transitoria sin el oficialismo en medio de la crisis institucional


San Lorenzo atraviesa uno de los capítulos más delicados de su historia reciente. La crisis institucional, agravada por problemas económicos, renuncias latentes y un clima político cada vez más áspero, entró en una fase determinante. En los últimos días, dirigentes del club mantuvieron reuniones clave con el presidente de la AFA, Claudio Tapia, y consiguieron su visto bueno para avanzar en un cambio drástico: la conformación de una comisión transitoria, sin participación del oficialismo y con avales económicos destinados a afrontar las deudas más urgentes y el pedido de quiebra que golpea a la institución.

Armado opositor para afrontar la emergencia

La propuesta presentada ante Tapia marca un quiebre profundo dentro del mapa político de San Lorenzo. El nuevo esquema tiene como figura central a Sergio Constantino, actual vocal opositor y candidato a presidente que en las últimas elecciones quedó en tercer lugar.

Junto a él se integraría Cristian Evangelista, también opositor y miembro de la actual Comisión Directiva. La particularidad del armado es que no incluye a dirigentes de peso del oficialismo, lo que evidencia la pérdida de apoyo interno hacia el actual presidente, Marcelo Moretti, y la decisión de los sectores opositores de tomar las riendas en medio de la emergencia de San Lorenzo.

Según fuentes del club, el respaldo a este nuevo formato se apoya en dos columnas: por un lado, la necesidad de resolver de inmediato la crítica situación financiera; por el otro, el convencimiento de que la conducción actual carece de legitimidad y capacidad de respuesta para afrontar el deterioro institucional. La AFA, ante este cuadro, aceptó intervenir indirectamente mediante el aval a la nueva estructura.

San Lorenzo, Crisis

Renuncias masivas y acefalía: el paso previo al recambio

La próxima semana aparece como el punto de inflexión del proceso. Tapia impulsaría la convocatoria a una reunión de Comisión Directiva en la que se prevé un movimiento de alto impacto: renuncias masivas de los actuales directivos de San Lorenzo. Ese paso provocaría una situación de acefalía formal, condición necesaria para habilitar la conformación de la comisión transitoria que administrará el club por un período aún no definido.

La duración de esa conducción provisoria quedará bajo la órbita de la AFA, que será la encargada de fijar los plazos y determinar cuándo estarán dadas las condiciones para convocar a nuevas elecciones. La idea, de acuerdo a las conversaciones con dirigentes opositores, es priorizar primero el reordenamiento institucional, ordenar las cuentas, estabilizar la gobernanza del club y recién después definir un calendario electoral.

San Lorenzo, crisis, Moretti

Prioridad: ordenar Boedo antes de pensar en el futuro

El nuevo esquema se plantea como una respuesta urgente ante un escenario crítico. San Lorenzo arrastra compromisos financieros importantes, litigios pendientes y un pedido de quiebra que aceleró la necesidad de tomar decisiones estructurales. Los promotores de la transición aseguran que cuentan con avales económicos para afrontar los compromisos inmediatos, condición indispensable para obtener el visto bueno de la AFA.

Para el organismo que conduce Tapia, el reordenamiento de San Lorenzo es prioritario. La intención es evitar que una crisis política interna termine repercutiendo en el ámbito deportivo o en la relación institucional del club con la Liga Profesional y con organismos internacionales.

San Lorenzo, Equipo

El plantel reacomoda su calendario

En paralelo al terremoto dirigencial, el plantel profesional también tuvo novedades importantes. Se definió que el equipo continuará entrenando hasta el 5 de diciembre, fecha en la que finalizará la actividad formal del año. Tras ello, los jugadores iniciarán un período de vacaciones que se extenderá hasta el 27 de enero, cuando retomarán los trabajos con vistas a la triple competencia que afrontará San Lorenzo en 2026.

Ese parate prolongado busca evitar que el conflicto institucional afecte la planificación deportiva y permitir que el nuevo cuerpo dirigencial —una vez conformado— pueda organizar la pretemporada, definir refuerzos y establecer una hoja de ruta clara para el próximo año.

San Lorenzo vive un momento decisivo. Las próximas reuniones no solo podrían definir el final de la gestión encabezada por Moretti, sino también el inicio de una etapa completamente nueva, con una conducción provisoria encabezada por la oposición y supervisada institucionalmente por la AFA. En un club marcado históricamente por su vida política intensa, las decisiones de los próximos días pueden cambiar el rumbo inmediato y sentar las bases para un futuro que hoy aparece tan incierto como desafiante.