De las rotondas a los giros en U: el sistema que podría transformar las rutas argentinas

Un nuevo sistema vial que gana terreno en Estados Unidos podría convertirse en la solución para los problemas de tránsito en las rutas argentinas: se trata de los cruces RCUT (Restricted Crossing U-Turn), un diseño que busca reemplazar tanto a las rotondas como a los costosos pasos a nivel o puentes. Su principal objetivo es reducir los accidentes y mejorar la fluidez en intersecciones de rutas principales con caminos secundarios.
El RCUT es un formato mucho más económico y rápido de implementar que un puente o un túnel. A diferencia de las rotondas, que ralentizan el flujo vehicular, este sistema permite mantener la continuidad de la circulación en la vía principal. Por eso, especialistas lo señalan como una alternativa viable para países extensos como la Argentina, donde la disponibilidad de espacio no es una limitante.
Cómo funciona el RCUT
La clave de este sistema es evitar los cruces directos y los giros a la izquierda en intersecciones peligrosas. Cuando un vehículo llega desde un camino secundario y quiere incorporarse a una ruta principal, el RCUT obliga a girar primero a la derecha, recorrer entre 150 y 400 metros, y recién ahí realizar un giro en U desde un carril paralelo diseñado para esa maniobra. Luego, el conductor puede tomar la dirección deseada en la vía principal sin haber interrumpido el tránsito continuo.

Este diseño contempla carriles adicionales paralelos para acelerar o frenar de manera segura. Así, quienes hacen el giro en U no quedan circulando a baja velocidad frente a vehículos que transitan a la máxima permitida. El resultado es una mayor seguridad y una incorporación más ordenada al flujo de tránsito.
Cuando se trata de cruzar la ruta principal y continuar por el camino secundario, tras realizar el giro en U, el conductor debe volver a girar a la derecha al llegar a la intersección. En términos prácticos, se asemeja a rotondas más extensas y transversales al camino secundario, pero que resulta imperceptible para quienes circulan por la vía principal.

Ventajas frente a las rotondas
El RCUT se presenta como una alternativa más segura que las rotondas tradicionales. Uno de los principales beneficios es que elimina dos maniobras de alto riesgo: el cruce perpendicular y el giro a la izquierda. Ambas son responsables de los choques más graves en rutas, los denominados accidentes en “T”, que suelen tener consecuencias fatales.
Según datos de la Administración Federal de Carreteras de Estados Unidos (FHWA), la implementación de cruces RCUT permite reducir hasta un 54% los accidentes totales en las intersecciones intervenidas. Además, logra disminuir un 70% los siniestros con lesiones, lo que lo convierte en un diseño que salva vidas.
En cuanto a la fluidez del tránsito, los beneficios también son notables. A diferencia de las rotondas, que obligan a todos los vehículos a disminuir la velocidad, el RCUT mantiene el flujo continuo en la vía principal y reduce los tiempos de espera. Esto se traduce en menos cambios bruscos de velocidad y un tránsito más ágil.

Aplicación en la Argentina
El sistema podría aplicarse en varias rutas nacionales y provinciales del país. Actualmente, la ruta provincial 2, que conecta la Ciudad de Buenos Aires con la Costa Atlántica, tiene un diseño similar, aunque con deficiencias que no logran garantizar seguridad plena. Los especialistas aseguran que el RCUT es una evolución de esos sistemas y que corrige sus puntos débiles.
Entre las rutas nacionales donde el RCUT tendría mayor impacto figuran la 5, 7, 8 y 9 hacia el centro y sur del país, así como la 12 y la 14 que atraviesan la Mesopotamia. En todas estas trazas existen rotondas que podrían ser reemplazadas por este sistema con costos de obra mucho menores a los de un puente. La magnitud de movimiento de suelo necesario es similar, pero con resultados más efectivos en materia de seguridad.