River volvió a tropezar en el Monumental y cayó 1-0 ante Sarmiento

River perdió por cuarta vez consecutiva en el Torneo Clausura y fue silbado por su gente. El equipo de Marcelo Gallardo atraviesa su peor momento del semestre, con cinco derrotas en los últimos seis partidos, y empieza a ver amenazada su clasificación a la Copa Libertadores del año próximo. En una noche tensa en Núñez, Iván Morales marcó el único gol del encuentro para Sarmiento de Junín, que dio la sorpresa en el Monumental.
El choque, correspondiente a la 12ª jornada del Torneo Clausura, dejó expuestas las falencias de un River que no logra reencontrarse con su mejor versión. Falto de ideas, sin fluidez en el circuito de juego y con una defensa frágil, el equipo fue presa de su propia desesperación y del orden táctico de un rival que supo aprovechar su oportunidad. Los hinchas despidieron al plantel con una fuerte silbatina, en señal del creciente malestar por la seguidilla de malos resultados.
Un primer tiempo sin respuestas
Desde el arranque, River mostró un panorama preocupante. Nunca logró imponer condiciones ni generar peligro en el área rival, más allá de algunas aproximaciones aisladas. Sarmiento, en cambio, se mostró compacto, ordenado y con una estrategia clara: cerrar los espacios y apostar a la contra.
La apertura del marcador llegó a los 29 minutos, cuando Iván Morales aprovechó un rebote corto de Franco Armani tras un disparo lejano que no revestía mayor peligro. El delantero chileno no perdonó y puso el 1-0 que sería definitivo. El gol golpeó fuerte al Millonario, que siguió sin claridad ni profundidad en ataque. Gallardo gesticulaba con visible fastidio desde el banco, mientras su equipo no encontraba la forma de romper el bloque defensivo del Verde.

Impotencia y descontento en el Monumental
El complemento mantuvo el mismo desarrollo: River dominó la posesión, pero sin ideas, y su juego se volvió previsible y carente de sorpresa. Las imprecisiones en los pases y la falta de variantes ofensivas generaron un clima cada vez más hostil en las tribunas. A medida que pasaban los minutos, la impaciencia se transformó en enojo y los cánticos de apoyo se convirtieron en silbidos.
Gallardo buscó cambiar el rumbo con el ingreso de Miguel Ángel Borja, pero nada cambió. La más clara del segundo tiempo llegó en el minuto final, cuando Borja empujó al gol un centro bajo de Herrera, aunque el tanto fue anulado por posición adelantada. La jugada terminó por sellar una noche negra en Núñez.
Mientras tanto, Sarmiento, dirigido por Facundo Sava, realizó un partido inteligente: se replegó con orden, ganó los duelos individuales en defensa y no pasó sobresaltos en el cierre. El equipo de Junín consiguió así un triunfo histórico en el Monumental, que lo deja con aire en la pelea por la clasificación a la Copa Sudamericana.
River, en caída libre y con el futuro en duda
Con este nuevo traspié, River quedó quinto en la Zona B con 18 puntos, lejos del líder y con la necesidad urgente de reaccionar. En la tabla anual, el Millonario marcha tercero con 49 unidades, posición que le permitiría acceder al repechaje de la Copa Libertadores. Sin embargo, su lugar está en riesgo: si Deportivo Riestra vence a Platense, lo superará y lo dejará fuera de la zona de clasificación directa.
El presente del equipo de Gallardo preocupa. Más allá de los resultados, lo que más inquieta es el nivel de juego, la falta de confianza y la pérdida de identidad futbolística que durante años caracterizó al ciclo del “Muñeco”.

Lo que viene
River intentará cortar la racha negativa el sábado 18 de octubre a las 22:15, cuando visite a Talleres en el Mario Alberto Kempes, un estadio históricamente difícil. Por su parte, Sarmiento recibirá a Vélez en Junín con la ilusión de seguir escalando posiciones.
El desafío para el Millonario será recuperar la memoria futbolística y la conexión con su gente, en un momento donde las dudas pesan más que las certezas.