Récord en el mar: la pesca se consolida como el rubro de mayor expansión
En medio de un sector primario productivo que sigue mostrando buenos resultados en la agricultura y la ganadería, la pesca se posiciona como el rubro de mayor crecimiento en la economía argentina. Así lo indican los datos difundidos por la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca (SAGYP), que reflejan un desempeño excepcional de la actividad durante los últimos meses.
Según el informe de la SAGYP, en septiembre la actividad pesquera registró una expansión del 58,2% con respecto a igual mes de 2024, “ubicándose como el principal rubro en aumento de la actividad económica estimado por el INDEC”, enfatizó la cartera. Este crecimiento convierte al sector en un protagonista clave dentro de la economía nacional, destacándose entre otras actividades productivas que también muestran señales de recuperación y expansión.
Los buenos números de la pesca
La dinámica positiva del sector se confirma además con los últimos datos de la Subsecretaría de Pesca. Al 25 de noviembre, los desembarcos totales ya superaban las cifras registradas en la misma fecha del año anterior, con 758.074 toneladas frente a 755.688 toneladas. Esta cifra supera en más de 50.000 toneladas los desembarcos totales de 2023, consolidando una temporada récord para el sector.
Entre los productos que impulsan este crecimiento, el calamar se destaca por su excelente campaña, alcanzando al 25 de noviembre 206.992 toneladas, un 34% más que en la misma fecha de 2024. Este incremento no solo refleja la abundancia de la especie, sino también la efectividad de la planificación pesquera y el trabajo coordinado con los productores y armadores que operan en la costa atlántica.

En paralelo, la captura de merluza hubbsi al sur del paralelo 41º se mantuvo estable, lo que permitió reducir el impacto negativo en esta especie y compensar el retraso en el inicio de la campaña de langostino. De esta manera, el sector logra equilibrar la producción de distintas especies, asegurando que la oferta se mantenga constante y favoreciendo la estabilidad de los mercados internos y externos.
Un sector estratégico para la economía
La pesca no solo aporta al crecimiento económico, sino que también representa una fuente significativa de empleo y divisas para el país. La temporada de calamar y la estabilidad en la captura de otras especies permiten sostener la actividad de buques pesqueros, plantas procesadoras y toda la cadena logística vinculada al sector, desde puertos hasta exportaciones.
Según la SAGYP, la consolidación de la pesca como el rubro más dinámico de la economía en septiembre refuerza la importancia de mantener políticas de fomento y regulaciones claras que garanticen la sostenibilidad de las especies y la competitividad de las empresas nacionales frente al mercado internacional.

Perspectivas de crecimiento
La tendencia positiva del sector abre oportunidades para invertir en infraestructura portuaria, tecnología de procesamiento y logística, así como para ampliar la oferta de productos en mercados internos y externos. La combinación de capturas récord y gestión responsable permite proyectar una temporada 2026 con crecimiento sostenido, asegurando que la pesca continúe siendo un motor económico y un aporte clave para la balanza comercial.
Además, la SAGYP subraya que el éxito de la pesca se integra con los buenos resultados del agro, destacando la complementariedad de los sectores primarios en la generación de empleo y riqueza. La expansión de la pesca, junto con la estabilidad agrícola y ganadera, contribuye a una economía más diversificada y resiliente, capaz de afrontar desafíos climáticos y de mercado.
La pesca argentina vive un momento de auge, liderando la actividad económica del país con un crecimiento del 58% en septiembre y registros históricos en especies clave como el calamar y la merluza hubbsi. La combinación de buenas capturas, gestión sostenible y políticas de apoyo al sector posiciona a la pesca como un motor estratégico para el desarrollo económico y un ejemplo de cómo los recursos naturales bien gestionados pueden traducirse en oportunidades concretas para productores, trabajadores y mercados nacionales e internacionales.
