Maíz: los recortes productivos globales aportan sostén al mercado según el USDA
A diferencia de la soja, el mercado del maíz mostró en diciembre algunas señales más firmes, impulsadas por ajustes en la oferta global que comenzaron a reflejarse en los balances internacionales. El USDA recortó la producción mundial del ciclo 2025/26 en 3,3 millones de toneladas, ubicándola en 1.282,9 millones, un dato que fue bien recibido por los operadores.
Estados Unidos y Ucrania, en el centro de la escena
El ajuste respondió principalmente a una menor producción estimada en Ucrania, cuya cosecha fue recortada de 32 a 29 millones de toneladas. Al mismo tiempo, las exportaciones globales también se redujeron en 1,5 millones de toneladas, lo que ayudó a reordenar parcialmente los stocks.
En Estados Unidos, el informe trajo una señal positiva: las exportaciones fueron incrementadas en 3 millones de toneladas, alcanzando las 81,3 millones. Este dato refuerza el rol del maíz estadounidense como proveedor clave en el comercio global y aporta sostén a los precios en Chicago.

Brasil y Argentina: producción firme, pero con matices
En Sudamérica, la Conab ajustó levemente al alza la producción brasileña para el ciclo 2025/26, llevándola a 138,8 millones de toneladas. Sin embargo, este volumen sigue por debajo del registrado en la campaña anterior, lo que limita la presión bajista.
En Argentina, el USDA sostuvo la proyección de 53 millones de toneladas, en un contexto de buen avance de siembra y perfiles de humedad favorables. Este escenario posiciona al maíz como un cultivo con mejor equilibrio relativo frente a la soja, tanto desde lo productivo como desde lo comercial.

Un mercado con mejor balance
Los stocks finales mundiales de maíz continúan siendo elevados, pero los ajustes recientes marcan un cambio en la dinámica. El mercado empieza a encontrar cierto equilibrio entre oferta y demanda, con un consumo que sigue firme, especialmente para alimentación animal y bioetanol.

Para el productor argentino, el maíz aparece como un cultivo con mejores fundamentos de mediano plazo. La combinación de demanda sostenida, ajustes productivos y una relación insumo-producto más favorable refuerza su atractivo dentro de las rotaciones.
