Independiente derrotó a Central, le sacó el invicto y alimenta su sueño de jugar una copa internacional


Independiente cerró el año de la mejor manera. En un Libertadores de América–Ricardo Enrique Bochini con buen marco de público y frente al líder de la Zona B del Torneo Clausura, el equipo de Gustavo Quinteros venció 1-0 a Rosario Central y se ilusiona con clasificarse a la Copa Sudamericana 2026. El único gol de la noche lo marcó Gabriel Ávalos, a los 28 minutos de la primera parte, en un partido que también terminó con tensiones: el árbitro Sebastián Zunino expulsó a Rodrigo Fernández Cedrés y Ignacio Malcorra tras una discusión encendida cuando ya se había consumado el triunfo rojo.

Independiente llegaba con confianza luego de una levantada notable en el cierre del campeonato, y lo ratificó con una actuación sólida, pragmática y efectiva. La ausencia de dos figuras claves en el Canalla, Ángel Di María y Alejo Véliz, le permitió a Independiente asumir mayor protagonismo. Con esta victoria, alcanzó una racha perfecta de cuatro triunfos consecutivos, que lo depositan en la pelea por un cupo internacional. Ahora deberá esperar por varios resultados ajenos: que Huracán no derrote a Barracas Central, que Lanús supere a Atlético Mineiro en el certamen continental, o que alguno de los equipos ya clasificados a torneos internacionales se consagre en el Clausura.

Un líder que cayó, pero sin consecuencias graves

Por su parte, Rosario Central no pudo sostener su invicto en el Torneo Clausura, pero la derrota no altera su situación en la competencia. El equipo de Ariel Holan ya tenía garantizado el primer puesto de la Zona B, posición que le otorga la localía en los playoffs y asegura un camino favorable pensando en el título. Además, mantiene su clasificación a la Copa Libertadores 2026 y su presencia en la definición de la Supercopa Internacional.

Más allá del resultado, Central mostró momentos de buen funcionamiento colectivo y confirmó por qué ha sido uno de los equipos más regulares del semestre. La caída en Avellaneda ante Independiente corta una racha positiva, pero también permite medir su carácter competitivo de cara a los cruces decisivos que se avecinan.

Independiente, Gabriel Ávalos

Primer tiempo dinámico y con un gol decisivo

El partido tuvo un arranque dinámico y atractivo. Ambos equipos buscaron lastimar desde el primer minuto, cada uno con sus argumentos. En Independiente, el uruguayo Matías Abaldo se mostró como el futbolista más activo, picante y desequilibrante, atacando constantemente los espacios que dejaba la defensa canalla. Del lado visitante, el colombiano Jáminton Campaz fue el principal generador de peligro, apostando por su velocidad y cambio de ritmo para romper por la banda izquierda.

Aun con ese ida y vuelta, el gol tardó en llegar. Y cuando lo hizo, fue con una jugada trabajada. A los 28 minutos, Facundo Zabala envió un centro preciso desde la izquierda y Ávalos, ganándole la posición a su marcador, conectó un cabezazo potente que dejó sin reacción a Jorge Broun. Fue el 1-0 y un desahogo para Independiente, que a partir de ese momento logró manejar mejor los tiempos del partido. Aunque ambos equipos mostraron pasajes de buen fútbol, el marcador no volvió a moverse en el primer tiempo.

Central empujó y Rey se convirtió en figura

Central salió decidido a buscar el empate en la segunda parte y tuvo un comienzo furioso. Enzo Copetti se transformó en extremo por momentos y lanzó un centro al área que encontró la cabeza de Gaspar Duarte, obligando a Rodrigo Rey a realizar una atajada extraordinaria con su pierna derecha. Fue la primera gran intervención del arquero de Independiente, que luego tendría más trabajo.

Poco después, nuevamente Duarte tuvo el empate en sus pies. Quedó mano a mano con Rey y, aunque la jugada fue polémica por un posible penal reclamado por el banco visitante, el arquero salió rápido, achicó los espacios y se arrojó sobre la pelota para evitar el gol. La acción continuó sin sanciones y mantuvo viva la ventaja del Rojo, que resistía como podía ante el avance del Canalla.

Independiente, Zabala

Final caliente en Avellaneda

En los minutos finales, Central aumentó la presión y arrinconó a Independiente. A los 40, un remate de Agustín Módica obligó a Rey a volar sobre su palo izquierdo para desviar la pelota. En el rebote, Duarte no pudo empujarla y desperdició la última gran ocasión del Canalla.

En la última jugada, un tiro libre de Ignacio Malcorra se fue apenas alto y selló la derrota visitante. La calentura quedó en evidencia tras el pitazo final, cuando una discusión terminó con las expulsiones de Malcorra y Rodrigo Fernández Cedrés, en una imagen que contrastó con la celebración roja.