Huracán no pudo con Once Caldas y se despidió de la Copa Sudamericana

En una noche cargada de emociones, polémicas y frustraciones en Parque Patricios, Huracán quedó eliminado de la Copa Sudamericana tras caer 3 a 1 ante Once Caldas. El equipo colombiano dio el golpe en el Tomás Adolfo Ducó y avanzó con autoridad a los cuartos de final del torneo continental, dejando al “Globo” fuera de competencia y con una imagen deslucida.
El equipo dirigido por Frank Darío Kudelka tenía la obligación de revertir el 1-0 sufrido en la ida en Manizales. A pesar de un arranque con ímpetu y dominio territorial, la noche se fue torciendo tras un primer tiempo frenético, en el que pasó de la ilusión del empate global a quedar en desventaja y con un hombre menos.
La intensa lluvia sobre Buenos Aires fue un factor más en el desarrollo caótico del juego. El campo anegado condicionó la circulación del balón y favoreció un desarrollo trabado, físico, donde cada error podía costar caro. Y así fue.

Un primer tiempo de locura y drama
Huracán salió decidido a empatar la serie desde el inicio. A los cinco minutos, un gol anulado a Luciano Giménez por un fuera de juego dudoso de Leonel Pérez desató la primera polémica de la noche. El VAR no intervino, pese a tratarse de una jugada de interpretación, lo que generó malestar en el banco local.
Sobre la media hora, una combinación entre Giménez y Juan Bisanz generó otra oportunidad clara para el “Globo”, pero los reflejos de James Aguirre volvieron a decir presente. También lo intentó Leonardo Gil desde media distancia, pero el “Colo” estuvo impreciso.
Las emociones llegaron al final de la primera parte. Una infracción de Juan Cuesta sobre Bisanz fue sancionada como penal por el árbitro brasileño Paulo Zanovelli, y Matko Miljevic lo cambió por gol, desatando el delirio en las tribunas. El 1-0 parcial empataba la serie y renovaba la esperanza.
Pero la alegría duró muy poco. Apenas un minuto después, Michael Barrios desbordó por la derecha, eludió a Hernán Galíndez y asistió a Dayro Moreno, que marcó de cabeza el 1-1 que silenció el Palacio Ducó. El golpe fue tan fuerte que Huracán entró en un estado de desconcierto total.
Para colmo, antes del entretiempo, Juan Bisanz fue expulsado por un codazo contra Cuesta, tras la revisión del VAR. En cuestión de minutos, el “Globo” pasó de la euforia a la desesperación: de estar en ventaja, a volver a estar abajo en la serie y con uno menos.
El segundo tiempo sentenció la serie
Ya en el complemento, Once Caldas aprovechó su superioridad numérica y mental. El equipo colombiano no solo aguantó los embates sin claridad de Huracán, sino que supo golpear en los momentos justos.
Michael Barrios, de gran partido, liquidó el pleito con un contragolpe letal, aprovechando los espacios que dejó un desesperado Huracán en el fondo. El 2-1 parcial obligaba al “Globo” a marcar dos goles más con un jugador menos.

Dayro Moreno, la gran figura de la tarde, selló el 3-1 definitivo con otra aparición en el área que desnudó todos los problemas defensivos del conjunto de Kudelka. La serie quedó completamente definida, y el tramo final del partido fue desprolijo, cargado de impotencia.
Un cierre bochornoso para el “Globo”
La frustración se apoderó de Huracán en los últimos minutos. La tensión acumulada derivó en reacciones violentas. Matko Miljevic, autor del único gol del equipo, fue expulsado por estrangular a un rival, una acción inaceptable que simbolizó la impotencia y el descontrol del equipo argentino.
El pitazo final dejó un panorama desolador en Parque Patricios. Huracán se despidió de la Copa Sudamericana con un sabor amargo, tras una noche que tuvo de todo: goles, polémicas, expulsiones y una dura lección futbolística.