Ganadería: Senasa prorrogó por 60 días la medida en revisión del ingreso de carne a la Patagonia
La ganadería sigue con la discusión por el ingreso de carne con hueso a la región patagónica volvió a quedar en pausa. El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) resolvió prorrogar por otros 60 días la aplicación de la resolución que habilitaba el ingreso de carnes —con o sin hueso— y material reproductivo desde zonas libres de fiebre aftosa con vacunación hacia la Patagonia, considerada zona libre de esta enfermedad pero sin vacunación.
La ganadería y un nuevo capítulo de la barrera sanitaria
La medida para la ganadería, originalmente establecida el 18 de marzo de 2025 mediante la Resolución N° 186, había generado una fuerte reacción en las provincias del sur del país, que hasta ahora no convalidaron el cambio sanitario propuesto por el Gobierno nacional. Frente a esa falta de consenso, y ante las inquietudes planteadas por los gobiernos provinciales y sectores productivos, Senasa decidió extender el plazo de revisión de la resolución para seguir discutiendo sus alcances y posibles implicancias sanitarias, económicas y comerciales.
La Patagonia argentina —compuesta por las provincias de Río Negro, Neuquén, Chubut, Santa Cruz y Tierra del Fuego— ha mantenido durante años un estatus sanitario diferencial para la ganadería dentro del país. A diferencia del resto del territorio nacional, donde se vacuna contra la fiebre aftosa, en el sur se ha erradicado la vacunación, lo que le permite a la región mantener una certificación internacional como zona libre sin vacunación. Este estatus es clave para acceder a mercados exigentes, que imponen restricciones estrictas a la importación de productos provenientes de zonas con vacunación.
La posibilidad de permitir el ingreso de productos animales —especialmente carne con hueso y semen bovino— desde zonas con vacunación ha generado una fuerte preocupación en las autoridades patagónicas. Temen que esta medida ponga en riesgo el estatus sanitario que costó décadas construir y que, además, abre las puertas a una competencia desigual con productores de otras regiones que operan bajo costos y normas diferentes.
En este contexto de la ganadería, el Senasa comunicó que la resolución permanece “en revisión” y que, mientras tanto, no se implementará. Además, convocó a los gobernadores patagónicos y a entidades representativas del sector agropecuario a conformar una Mesa de Diálogo y Trabajo. Este espacio, que funcionará bajo la órbita de la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, tendrá como objetivo debatir de manera conjunta los alcances de la norma y coordinar acciones para su posible aplicación futura.
El gobierno nacional había argumentado que la medida busca facilitar la circulación interna de productos y mejorar el acceso a tecnologías reproductivas en todo el país. Sin embargo, desde la región patagónica consideran que el cambio se implementó de forma unilateral, sin el necesario consenso técnico ni político, y que puede poner en riesgo no solo la salud animal, sino también el posicionamiento internacional de la Patagonia como región exportadora premium.
La prórroga llega en un contexto de creciente tensión entre las provincias del sur y el Gobierno nacional por temas vinculados a la descentralización de decisiones sanitarias y comerciales. Los gobernadores han sido claros: no permitirán el ingreso de productos de riesgo hasta que no haya certezas sobre la seguridad sanitaria y no se garantice que el nuevo esquema no afectará a los productores locales ni a sus mercados de exportación.
Mientras tanto, la resolución sigue suspendida y el debate se traslada ahora al ámbito político-técnico, con la Mesa de Diálogo como escenario clave para intentar acercar posiciones para la ganadería. El desafío será encontrar una salida que contemple las necesidades de integración del mercado interno, sin poner en juego los logros sanitarios ni los intereses estratégicos de una de las regiones más protegidas y valiosas del país en términos sanitarios y comerciales.
