SENASA fiscalizó la segunda campaña de vacunación contra la fiebre aftosa en Entre Ríos

Inspectores del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA) realizaron una serie de fiscalizaciones en establecimientos ganaderos de la provincia de Entre Ríos, en el marco de la segunda campaña anual de vacunación contra la fiebre aftosa. El objetivo de estas acciones es garantizar la correcta aplicación de las dosis, preservar la sanidad del rodeo nacional y mantener el estatus sanitario que distingue a la Argentina a nivel internacional.
La campaña, iniciada el 13 de octubre, cuenta con la participación de la Fundación de Lucha contra la Fiebre Aftosa (Fucofa), entidad que colabora activamente con el SENASA en la organización y ejecución de las tareas en todo el territorio provincial. A través de inspecciones técnicas en el campo, el organismo busca verificar la calidad de los procedimientos, el cumplimiento de las normas sanitarias y la efectividad del proceso de inmunización.
Desde el SENASA subrayaron que estas fiscalizaciones son esenciales no solo para resguardar la salud animal, sino también para proteger la confianza de los mercados internacionales y fortalecer la posición del país como exportador de carne y productos de origen bovino.

Controles técnicos y supervisión en el campo
Los equipos del Centro Regional Entre Ríos del SENASA llevaron adelante auditorías en distintos puntos de la provincia, donde verificaron el desempeño de los vacunadores y la correcta manipulación de los insumos. Durante las inspecciones, se controló el estado sanitario de los animales, la temperatura y conservación de las vacunas, el stock declarado, la velocidad y volumen de aplicación y el funcionamiento de las jeringas.
Asimismo, los inspectores evaluaron las condiciones de las instalaciones rurales y la disponibilidad de personal para llevar adelante las tareas de inmunización contra la fiebre aftosa. También se constató el cumplimiento de las normas de higiene y bioseguridad establecidas por la Resolución SENASA 33/2022, que regula las buenas prácticas en vacunación y establece parámetros técnicos para garantizar la efectividad del biológico.
El control abarcó, además, la trazabilidad de las dosis, el registro documental y la correspondencia entre los datos declarados y los constatados en cada predio. Todo este proceso de fiscalización tiene como fin asegurar la transparencia y la confianza en el sistema sanitario nacional, uno de los pilares del comercio agropecuario argentino.

Preservar la sanidad y el estatus internacional
Desde el organismo sanitario destacaron que estas acciones no solo buscan comprobar la correcta ejecución del plan, sino también mantener la favorable situación epidemiológica del país frente a la fiebre aftosa. Argentina conserva su condición de país libre con vacunación, estatus reconocido por la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA), que permite acceder a los principales mercados internacionales.
“El trabajo conjunto entre el SENASA, la Fucofa y los productores resulta clave para sostener el éxito del sistema sanitario argentino. Las fiscalizaciones permiten asegurar que cada dosis se aplique correctamente y que la cobertura sea total en el rodeo”, destacaron fuentes del organismo.
El SENASA recordó que el control de la fiebre aftosa es una responsabilidad compartida entre el Estado, las fundaciones y los productores, y que la colaboración de todos los actores es indispensable para sostener la inocuidad y competitividad del sector ganadero.

Una enfermedad que exige prevención constante
La fiebre aftosa es una enfermedad viral altamente contagiosa que afecta a animales de pezuña hendida —como bovinos, porcinos, ovinos y caprinos—, provocando fiebre, lesiones y pérdida de productividad. Si no se previene de forma adecuada, puede generar importantes perjuicios económicos y restricciones al comercio internacional de carnes.
Por ello, la vacunación sistemática constituye una herramienta central dentro de la política sanitaria argentina. Las autoridades del SENASA adelantaron que los controles continuarán en las próximas semanas a medida que la campaña de vacunación contra la fiebre aftosa avance por los distintos departamentos de Entre Ríos. Además, recordaron que los productores deben vacunar todos sus bovinos y bubalinos y conservar la documentación que acredite el cumplimiento de esta obligación.
Con estas acciones, el SENASA reafirma su compromiso con la seguridad alimentaria, la salud animal y el fortalecimiento del sistema productivo nacional, elementos esenciales para sostener la competitividad del agro argentino en los mercados globales.