Facundo Bagnis suspendido provisionalmente por dopaje: el tenista argentino alega “contaminación cruzada”
El tenis argentino recibió un fuerte impacto en las últimas horas. Facundo Bagnis, de 35 años y ex número 55 del mundo, decidió aceptar una suspensión provisional voluntaria luego de haber dado positivo en un control antidopaje por hidroclorotiazida, una sustancia prohibida por la Agencia Mundial Antidopaje (WADA).
La noticia fue confirmada oficialmente por la Agencia Internacional de Integridad del Tenis (ITIA), que detalló los alcances del caso y las consecuencias inmediatas para el jugador.
Un positivo en el US Open
El control al santafesino se realizó el 18 de agosto, durante la etapa clasificatoria del US Open 2025, último Grand Slam del año, disputado en Nueva York. En esa muestra, los análisis revelaron la presencia de hidroclorotiazida, un diurético incluido en la lista de sustancias prohibidas del Programa Antidopaje del Tenis (TADP), dentro del grupo de “diuréticos y agentes enmascarantes”.
Según la ITIA, Facundo Bagnis no contaba con una Autorización de Uso Terapéutico (TUE) válida para justificar la presencia del compuesto. Si bien el tipo de sustancia no obliga automáticamente a una suspensión inmediata, el propio jugador optó por someterse a una suspensión provisional voluntaria a partir del 18 de octubre, mientras avanza el proceso disciplinario.
Durante este período, no podrá competir, entrenar ni asistir a torneos organizados o sancionados por ninguna de las entidades asociadas a la ITIA —entre ellas la ATP, WTA, ITF, Wimbledon, la USTA o las federaciones nacionales—. El tiempo que permanezca inhabilitado se descontará de una posible sanción definitiva, en caso de que esta se confirme.
“Nunca tomaría conscientemente algo prohibido”
A través de un extenso comunicado en sus redes sociales, Facundo Bagnis expresó su sorpresa y defendió su inocencia, asegurando que jamás consumió deliberadamente una sustancia prohibida. “Estoy pasando uno de los peores momentos de mi carrera. El examen mostró la presencia de hidroclorotiazida y se inició un proceso disciplinario. La noticia me tomó completamente por sorpresa”, escribió.
El jugador explicó que colabora de manera “total y transparente” con la ITIA y que decidió aceptar la suspensión para concentrarse en demostrar su inocencia. “Nunca tomaría conscientemente algo prohibido. Tengo plena confianza en que la verdad saldrá a la luz”, señaló.
Acompañado por un equipo médico, abogados y un toxicólogo, Facundo Bagnis afirmó que “sospecha de contaminación cruzada”, una hipótesis frecuente en casos de trazas mínimas de sustancias halladas en suplementos o alimentos. “Hoy es nuestro primer objetivo demostrarlo. Agradezco de corazón a quienes confían en mi integridad”, concluyó.
El apoyo del circuito argentino
La noticia generó repercusiones inmediatas en el tenis nacional, y varios jugadores argentinos —entre ellos Francisco Cerúndolo, Tomás Etcheverry, Pedro Cachin y Facundo Mena— manifestaron públicamente su respaldo a Facundo Bagnis, destacando su trayectoria y conducta profesional.
El jugador nacido en Armstrong (Santa Fe) es profesional desde 2008 y acumuló una extensa carrera en el circuito ATP y Challenger. Su mejor ranking lo alcanzó en noviembre de 2016 (puesto 55), impulsado por una temporada sobresaliente en la que ganó seis torneos del circuito Challenger. En total, conquistó 17 títulos en esa categoría y disputó dos finales ATP: en Santiago de Chile (2021) y en Córdoba (2024).
En lo que va de 2025, Bagnis alternó competencias en el circuito Challenger, donde alcanzó los cuartos de final en Villa María, cayó en segunda ronda en Buenos Aires y se retiró en Antofagasta, Chile. Actualmente ocupa el puesto 401 del ranking ATP.
Otro argentino bajo investigación
El caso de Facundo Bagnis se suma a otro episodio reciente que involucra a un jugador nacional. Días atrás, la ITIA comunicó la suspensión provisional de Leonardo Aboian (27 años), quien enfrenta una investigación por presuntas infracciones al Programa Anticorrupción del Tenis (TACP).
De acuerdo con el organismo, existen indicios de una infracción grave que justificarían la medida. En caso de confirmarse, el jugador —que alcanzó el puesto 229 del mundo en abril pasado— podría recibir una sanción que comprometería su continuidad profesional.
