El Gobierno oficializó la emergencia agropecuaria en Buenos Aires hasta el 31 de octubre


El Gobierno nacional declaró el estado de emergencia agropecuaria en amplias zonas de la provincia de Buenos Aires que resultaron gravemente afectadas por las inundaciones registradas desde el 1° de mayo y que se extenderán hasta el 31 de octubre de 2025. La decisión fue oficializada a través de la resolución 1450/2025 del Ministerio de Economía, firmada por Luis Caputo y publicada este miércoles en el Boletín Oficial.

La medida contempla beneficios impositivos y financieros destinados a productores agropecuarios que vieron comprometidas sus explotaciones agrícolas y ganaderas. Se trata de un alivio esperado por el sector, en un contexto en el que las lluvias persistentes y el anegamiento de campos impactaron de manera significativa sobre la producción.

Alcance territorial de la resolución

La resolución establece que la emergencia agropecuaria rige para explotaciones de los partidos de Hipólito Yrigoyen, General Alvear, General Viamonte, Las Flores, Chivilcoy, Junín, Roque Pérez, General Lamadrid, Chacabuco y Monte, en distintas circunscripciones detalladas en el anexo oficial. Se trata de distritos en los que la acumulación de agua dejó bajo riesgo a miles de hectáreas de cultivos de trigo, cebada y maíz tardío, además de afectar seriamente la ganadería.

De acuerdo con el texto, los productores alcanzados por la medida deberán presentar un certificado emitido por la autoridad provincial que acredite que sus establecimientos están dentro de las zonas afectadas. Con esta constancia podrán acceder a los beneficios contemplados en la Ley 26.509, que regula el régimen nacional de emergencia y desastre agropecuario.

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Beneficios fiscales y crediticios

Entre las medidas previstas en la emergencia agropecuaria se destacan la prórroga en los vencimientos impositivos, la exención de determinados tributos y el acceso a facilidades crediticias en entidades bancarias oficiales, mixtas o privadas que operen con financiamiento nacional.

La normativa también instruye a la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA) y a las entidades financieras a arbitrar los mecanismos necesarios para que los productores damnificados puedan acceder de manera efectiva a los beneficios.

Además, el Gobierno de la provincia de Buenos Aires deberá remitir a la Comisión Nacional de Emergencias y Desastres Agropecuarios el listado de productores alcanzados, a fin de coordinar la aplicación de la medida.

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Plazos y vigencia

La norma establece que el 31 de octubre de 2025 será la fecha de finalización del ciclo productivo en las áreas bajo emergencia agropecuaria. De esta forma, los beneficios estarán vigentes hasta el cierre de la campaña afectada.

La resolución comenzó a regir desde su publicación en el Boletín Oficial, lo que habilita a los productores a iniciar de inmediato los trámites correspondientes.

Un alivio en medio de la crisis

La declaración de la emergencia agropecuaria llega en un momento clave para el campo bonaerense. Productores de distintas entidades habían advertido en las últimas semanas que la magnitud de las inundaciones ponía en riesgo no solo los cultivos de invierno, sino también la planificación de la siembra gruesa. En algunos partidos, más del 40% de la superficie productiva permaneció anegada durante los meses críticos, con pérdidas económicas millonarias.

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Desde las organizaciones rurales valoraron la medida, aunque remarcaron la necesidad de que los beneficios se implementen con rapidez. “La emergencia agropecuaria es un paso positivo, pero necesitamos que los trámites sean ágiles para poder sostener la actividad. Hay productores que no saben si van a poder afrontar la próxima campaña”, señaló un dirigente.

Mirada hacia adelante

Si bien la resolución busca mitigar el impacto inmediato de las inundaciones, expertos advierten que los fenómenos climáticos extremos se repiten con mayor frecuencia. En este sentido, destacan la necesidad de avanzar en políticas de infraestructura hídrica y planificación territorial que permitan reducir la vulnerabilidad de las zonas productivas.

El Gobierno nacional, en tanto, reiteró su compromiso de acompañar a los productores en la emergencia agropecuaria. Con la medida, miles de familias rurales podrán acceder a un alivio financiero en medio de un escenario adverso, mientras buscan recomponer sus explotaciones tras meses de lluvias ininterrumpidas y campos bajo el agua.