Cómo son los créditos para la ganadería que lanzó el gobierno

En un contexto de marcada incertidumbre financiera y desafíos estructurales para la producción de ganadería, el Gobierno Nacional presentó una nueva línea de créditos orientada a productores de carne bovina, con una propuesta innovadora: los pagos se realizarán en kilos de novillo. El anuncio se realizó este lunes durante la Exposición Rural de Palermo y fue encabezado por el secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca, Sergio Iraeta, junto al presidente del Banco de Inversión y Comercio Exterior (BICE), Maximiliano Voss.
Los créditos para la ganadería en detalle
El objetivo de esta línea crediticia es claro: apuntalar la recomposición del stock ganadero, frenar la liquidación anticipada de terneras y consolidar la base genética del rodeo nacional. “Estamos hablando de un negocio de mediano y largo plazo. Esta herramienta busca acompañar al productor para que no tenga que liquidar su reposición por falta de financiamiento”, sostuvo Iraeta, quien puso énfasis en el costado emocional de la actividad: “Cuando tenés que vender esa ternera que querías dejar como futura madre, te dan ganas de llorar. Esta línea te permite evitar eso y planificar”.
La propuesta para la ganadería contempla tres destinos posibles para los fondos: la compra de vaquillonas a servir o preñadas (hasta un 30% del stock declarado), la retención de terneras para cría (hasta un 20%) y capital de trabajo para alimentación, pasturas, fertilización y forraje (hasta un 20% adicional).

Pero el aspecto más innovador de esta línea para la ganadería es su modalidad de repago: los créditos se cancelan en pesos al valor del kilo de novillo, de acuerdo al Índice Novillo del Mercado Agroganadero (INMAG) correspondiente a la semana previa al vencimiento. De esta manera, el productor conoce desde el comienzo cuántos kilos deberá devolver, sin importar las oscilaciones de precios o la inflación. “El productor pacta, por ejemplo, 1.000 kilos. Si la carne sube, se achica el plazo; si baja, tiene más tiempo. Pero siempre paga la misma cantidad de carne. Eso da previsibilidad y facilita la toma de decisiones”, destacó el secretario, y recordó que este modelo ya se implementó con éxito en sectores como la lechería, el porcino y la soja, con más de 24 millones de dólares prestados.
En cuanto a las condiciones del crédito, el monto máximo es de hasta $800 millones por empresa. El plazo puede ser de hasta 60 meses, con la posibilidad de extenderlo a 84 si el precio del novillo cae y hace más lenta la amortización. La tasa de interés es UVA + 8% anual. Para capital de trabajo, los plazos van hasta 36 meses, prorrogables a 48, con un período de gracia de hasta seis meses.

Los requisitos de acceso también para los productores de ganadería son claros: las empresas deben estar registradas como MiPyMEs ganaderas de carne bovina, con inscripción vigente en el RENSPA y al menos cinco años de actividad comprobada. Además, se exige una garantía respaldada por una SGR o por el propio BICE.
Según Iraeta, esta herramienta apunta directamente al 60% del rodeo nacional, es decir, a los establecimientos con más de 250 vientres. “Es una herramienta moderna, clara, pensada para que el productor entienda cuánto va a pagar desde el principio. No como esos créditos con tasa fija que después no sabés lo que estás pagando”, aseguró.
Además, desde el Gobierno informaron que se está trabajando para que otras entidades financieras se sumen a este esquema de crédito en valor producto para la ganadería. “La idea es que el resto del sistema bancario lo adopte. Si se demuestra que opera bien, es lógico que otros bancos se sumen”, explicó Iraeta.

Este lanzamiento se da en el marco de una política de la ganadería que apunta a la desregulación del sector, con medidas como la eliminación del RUCA, la baja de retenciones, el fin del peso mínimo de faena y la liberación para exportar cortes antes restringidos. “El objetivo es liberar al productor para que pueda producir más y mejor”, concluyó el secretario.
Los interesados en acceder a esta línea pueden iniciar su trámite en el stand del BICE en Palermo o a través de los canales oficiales del banco. La apuesta es ambiciosa: más vientres, más previsibilidad y más carne argentina, tanto para el mercado interno como para la exportación.