Comienza el invierno 2025 con la irrupción de aire polar, heladas y estabilidad

Tras un otoño marcado por precipitaciones fuera de época, finalmente llegó el invierno, la estación fría con una potente irrupción de aire polar que pone punto final a las lluvias tardías y anticipa un cambio brusco en las condiciones meteorológicas en toda la región agrícola del país.
Según el último informe de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, la llegada de una masa de aire de origen antártico marca el comienzo definitivo de la temporada seca y fría que este año se retrasó aproximadamente tres semanas. A partir de esta semana, se espera un fuerte descenso de temperaturas, con la posibilidad de heladas generalizadas en distintas zonas del país, lo que impactará directamente sobre los cultivos y las labores agrícolas en curso.
Heladas y descenso térmico en gran parte del territorio
El ingreso del aire polar está provocando un marcado descenso de las temperaturas mínimas en amplias zonas del centro y sur del país. Las zonas más afectadas serán las áreas serranas y cordilleranas del oeste del NOA (Noroeste Argentino) y el oeste de Cuyo, donde se esperan temperaturas inferiores a los 0 °C y heladas generales con focos que podrían registrar valores de hasta -5 °C.
En tanto, el centro del NOA, el centro y este de Cuyo, la mayor parte de la Mesopotamia, la región Pampeana y el Uruguay experimentarán mínimas entre 0 y 5 °C. En estas zonas se esperan heladas localizadas, aunque no se descartan valores más bajos en sectores puntuales, lo que podría derivar en heladas de mayor intensidad.
Por otro lado, el este del NOA, gran parte del Chaco, el extremo norte de la región Pampeana y la mayor parte del Paraguay observarán temperaturas mínimas por encima de los 5 °C. Sin embargo, incluso en estas zonas más templadas, se esperan registros fríos, con sectores que podrían mantenerse cerca de los 10 °C.

El fin de un ciclo húmedo atípico
Durante las últimas semanas, muchas regiones del país venían experimentando lluvias fuera de temporada. Estos eventos, si bien contribuyeron en algunos casos a mantener los perfiles de humedad en el suelo, también generaron demoras en las cosechas y complicaciones logísticas en distintas zonas productivas.
Con esta irrupción polar, los especialistas de la Bolsa de Cereales anticipan que finalizará el período de lluvias tardías. “La entrada de aire frío marca el cierre definitivo de esta etapa y da paso a la temporada seca típica del invierno”, señala el informe climático.
Este cambio estacional es clave para el calendario agrícola. Por un lado, brinda condiciones más estables para avanzar con la recolección de los últimos lotes de soja y maíz. Pero por otro, obliga a extremar los cuidados en los cultivos invernales, como el trigo, que podrían verse afectados por las heladas tempranas si se encuentran en etapas fenológicas sensibles.

Perspectivas para los próximos días
Las condiciones meteorológicas se mantendrán frías durante los próximos días, con temperaturas mínimas por debajo del promedio en gran parte del país. Las heladas continuarán siendo una amenaza, especialmente en las zonas bajas y con menor cobertura vegetal.
Este panorama coincide con la transición hacia un patrón climático más estable, donde las precipitaciones serán escasas y las jornadas soleadas comenzarán a predominar. No obstante, los productores deberán mantenerse atentos a posibles nuevas irrupciones de aire frío, ya que la amplitud térmica típica del invierno argentino puede generar situaciones de riesgo en cortos períodos de tiempo.

Un invierno que comienza con fuerza
La llegada de este frente polar no solo cierra un capítulo atípico en términos de lluvias, sino que también representa el inicio formal del invierno para el sector agropecuario. Con heladas ya registradas en varios puntos del país, los productores deberán ajustar sus estrategias de manejo y protección de cultivos para enfrentar una campaña invernal que, según los pronósticos actuales, podría mantenerse dentro de los parámetros normales en cuanto a frío y sequía.
En definitiva, el clima vuelve a alinearse con los patrones estacionales históricos, y si bien el frío traerá desafíos, también pone fin a un período de inestabilidad que complicó el cierre de la campaña gruesa. Ahora, el foco está puesto en cómo evolucionarán las condiciones para los cultivos de invierno y en la planificación de la próxima siembra de granos finos.