Qué se juegan Boca y River en el Superclásico: los escenarios de clasificación a la Copa Libertadores 2026


El Superclásico de este domingo en La Bombonera no solo definirá un capítulo más de la rivalidad entre Boca y River, sino que también puede empezar a cerrar una de las grandes peleas de la temporada: la clasificación a la Copa Libertadores 2026.

El triunfo de Independiente Rivadavia en la Copa Argentina, su primer título local, otorgó un cupo directo al torneo continental y modificó el mapa de posibilidades. Con Platense y Rosario Central ya clasificados, quedan los últimos tres boletos disponibles. Y ahí es donde aparecen Boca y River, cada uno con realidades distintas, presiones diferentes y un duelo directo que puede marcar el desenlace.

Un Superclásico que vale más que tres puntos

La consagración de Independiente Rivadavia en la Copa Argentina luego de vencer a Argentinos Juniors por penales incluyó una definición cargada de simbolismo: el último remate lo convirtió Sebastián Villa, el delantero colombiano que encontró en Mendoza un nuevo renacer futbolístico. Pero en la tabla clasificatoria, su impacto fue aún mayor. Con la Lepra adentro de la Libertadores, la tabla anual se volvió la vía principal para determinar los cupos restantes.

En ese ranking, Boca llega mejor posicionado. El Xeneize suma 56 puntos, cuatro más que River y cinco sobre Argentinos Juniors, con seis puntos en juego hasta el final del Torneo Clausura. La ecuación es clara: depende de sí mismo y el Superclásico puede ser la llave definitiva.

Superclásico, Boca, River

River, en cambio, necesita ganar y esperar. Con 52 puntos, está dentro de la pelea, aunque sin margen para el error. La derrota del último fin de semana frente a Gimnasia complicó el escenario y generó un clima tenso alrededor del equipo de Marcelo Gallardo, que aún no encontró la solidez esperada desde su regreso al club.

Qué necesita Boca para clasificar

Boca podría asegurarse este domingo su clasificación a la Copa Libertadores 2026. Y lo haría sin depender de nadie.

  • Si Boca le gana a River: se clasifica de manera directa a la fase de grupos. La victoria lo colocaría fuera del alcance de sus perseguidores en la tabla anual, y la última fecha se jugaría ya sin presiones en ese sentido.
  • Si empata: quedará virtualmente clasificado, al menos, al repechaje (Fase 2). Luego dependerá de su resultado final para convertir ese cupo en acceso directo a la fase de grupos, algo posible si gana en la última fecha.
  • Si pierde: deberá definir su clasificación en la última jornada. No sería un escenario crítico, pero sí lo obligaría a jugar con la calculadora.

En otras palabras, Boca puede asegurarse este domingo la clasificación a la Copa Libertadores 2026 o, al menos, dejar casi sellado su ingreso.

Boca, La Bombonera, Paredes

Qué necesita River para clasificar

Para River, el panorama es más complejo:

  • Si River gana: se meterá en zona de repechaje y quedará con chances concretas de asegurar su clasificación a la Copa Libertadores 2026 en la última fecha. Un triunfo en La Bombonera sería un impulso anímico y deportivo importante, aunque no garantiza la clasificación por sí solo.
  • Si empata o pierde: seguirá con vida, pero dependiendo de otros resultados, lo que puede estirar la definición hasta el final del Clausura y complicar el cierre de año.

La situación de River es, así, menos matemática y más emocional de cara a la clasificación a la Copa Libertadores 2026: necesita ganar para sostener su aspiración y, sobre todo, para recuperar confianza y calma en un momento de cuestionamientos.

River, Torneo Clausura

Un Superclásico con efecto dominó

Lo que pase en La Bombonera no solo tendrá impacto en la clasificación a la Copa Libertadores 2026, sino también en la atmósfera interna de ambos clubes. Boca puede encontrar paz y planificación con un resultado favorable; River puede reconstruirse o profundizar tensiones según cómo termine la tarde.

No es una final. Pero se juega como si lo fuera. Porque en este Superclásico, ganar puede significar algo más que celebrar: puede abrir las puertas de la clasificación a la Copa Libertadores 2026. Y perder, cerrar muchas otras.