Todo sobre las caravanas electrónicas, la nueva etapa que inicia la ganadería argentina
La ganadería argentina se encamina hacia una transformación histórica con la puesta en marcha del nuevo Sistema Nacional de Identificación Electrónica de Animales (SNIEA), que será plenamente obligatorio desde el 1 de enero de 2026. A partir de las Resoluciones 530/2025 y 841/2025 del SENASA, el país inicia la transición hacia un modelo de trazabilidad total con las caravanas electrónicas, una herramienta clave para garantizar transparencia productiva, mejorar la gestión sanitaria y sostener el acceso a mercados internacionales cada vez más exigentes.
En este escenario, Villanueva —distribuidor oficial de Allflex, líder mundial en identificación animal— ocupa un rol central en la implementación de la nueva etapa. La compañía cuenta con más del 50% de participación de mercado, una red de más de 2000 puntos de venta y un sistema de soporte técnico nacional, lo que la posiciona como un actor clave en la disponibilidad y distribución de las caravanas electrónicas en todo el territorio.
Caravanas electrónicas en Argentina: qué dice la normativa
Con la entrada en vigencia del SNIEA, el proceso se estructura en dos hitos obligatorios: desde el 1° de diciembre de 2025 sólo podrán comercializarse dispositivos con componente electrónico, y desde el 1° de enero de 2026 todos los bovinos, bubalinos y cérvidos deberán estar identificados electrónicamente. El sistema adoptará un binomio oficial compuesto por caravana visual + dispositivo RFID, garantizando una identificación individual única y verificable durante toda la vida del animal.
“El camino está trazado. A partir del 1 de enero de 2026, todos los bovinos, bubalinos y cérvidos deberán estar identificados mediante caravanas electrónicas, y Villanueva está lista para acompañar esa transformación con servicio, disponibilidad de producto y cobertura nacional”, explicaron desde la firma.
Villanueva y Allflex: “Hay campos con caravanas electrónicas de más de 10 años”
La alianza entre Villanueva y Allflex combina tecnología de precisión, trayectoria y una logística sólida. Desde la empresa destacan que las caravanas electrónicas de Allflex se caracterizan por “su sistema de cierre que asegura una retención superior y una rápida cicatrización, además de la calidad del chip, que garantiza la lectura correcta. Su certificación ICAR avala la estabilidad y confiabilidad del dispositivo”.
En numerosos establecimientos ganaderos del país, técnicos han encontrado caravanas Allflex con más de 10 años de uso, lo que demuestra su resistencia y durabilidad incluso en sistemas extensivos.
Los productores podrán adquirir tres presentaciones oficiales homologadas por ICAR e INTI y auditadas por SENASA:
- Caravana electrónica tipo botón (RFID UHF)
- Bolo ruminal RFID electrónico
- Microchip inyectable RFID
Cada opción se adapta a distintos modelos productivos y estrategias de manejo, siempre dentro del marco regulatorio del nuevo sistema de identificación obligatoria.
Un ecosistema integral: identificación, lectura y gestión
Villanueva ofrece un ecosistema completo que abarca la identificación electrónica, la lectura de datos, el pesaje y el software de gestión, permitiendo que cada lectura RFID se convierta en información estratégica. Con estas herramientas, los productores pueden mejorar la eficiencia, monitorear el desempeño individual, gestionar movimientos y reforzar la sanidad del rodeo.
Además, la normativa incorpora un aspecto clave: la digitalización documental. Los productores podrán declarar la identificación directamente en SIGSA o mediante la app SIGBIOTRAZA, acelerando trámites, movimientos y certificaciones sanitarias, y eliminando barreras burocráticas que durante años complicaron la gestión diaria en los establecimientos ganaderos.
“No hay tiempo que perder”
La obligatoriedad de las caravanas electrónicas es sólo una parte del cambio. Para la empresa, la trazabilidad electrónica representa una oportunidad estratégica: “No hay tiempo que perder. Es obligatorio, pero también es una oportunidad. La trazabilidad electrónica eleva el estándar de nuestra ganadería y abre las puertas a nuevos mercados”.
Con tecnología disponible, normativa clara y una red de distribución consolidada, la ganadería argentina entra en una etapa decisiva. El uso masivo de caravanas electrónicas permitirá mejorar la competitividad, transparentar procesos y posicionar al país en un escenario global donde la trazabilidad total ya no es una opción, sino una condición para crecer.
