Brasil cierra un noviembre histórico en exportaciones de carne bovina: más volumen y mejores precios


Brasil volvió a consolidar su liderazgo global en el mercado de carne bovina con un noviembre excepcional. Según datos publicados por la Secretaría de Comercio Exterior (Secex), el país exportó 318.400 toneladas, un crecimiento del 39,6% respecto del mismo mes de 2024. El repunte no solo se reflejó en el volumen, sino también en la mejora del precio internacional, lo que impulsó la facturación del sector a niveles inéditos para esta altura del año.

La combinación de mayor oferta exportable, precios más firmes y una demanda internacional muy activa permitió que la facturación saltara a 1.754 millones de dólares, un incremento del 57,9% en comparación con noviembre del año pasado. Con estas cifras, los analistas ya anticipan que 2025 podría cerrar como un año récord tanto en toneladas despachadas como en ingresos totales para el complejo cárnico brasileño.

Un mes excepcional: más volumen y precios en alza

El desempeño de noviembre fue uno de los mejores del año para la industria exportadora. Con 318.400 toneladas embarcadas, Brasil superó ampliamente las 228.100 toneladas enviadas en noviembre de 2024. Este crecimiento refleja no solo una mayor disponibilidad de hacienda, sino también una estrategia comercial más agresiva por parte de los frigoríficos, que lograron acceder a mercados clave bajo mejores condiciones.

El precio promedio de exportación de Brasil alcanzó 5.508,8 dólares por tonelada, un 13,1% más que un año atrás. Esta mejora en la cotización internacional se explica por un reacomodamiento de la demanda global, especialmente desde China, Oriente Medio y Europa, que volvieron a presionar sobre el mercado ante la menor oferta de otros países competidores.

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La suba de precios es una señal positiva para la cadena productiva brasileña, que en meses anteriores había experimentado fluctuaciones derivadas de la desaceleración económica global. Con noviembre como punto de inflexión, el sector encuentra mejores márgenes y un escenario más favorable para el cierre del año.

Facturación en expansión: casi 1.800 millones de dólares en un solo mes

La mejora simultánea en volumen y precio permitió que la facturación alcanzara 1.754 millones de dólares, muy por encima de los 1.111 millones registrados en noviembre de 2024. Se trata de un incremento del 57,9%, una cifra que no solo confirma el momento de fortaleza del sector, sino que también refuerza las expectativas de que 2025 se encamine a un cierre histórico.

Uno de los indicadores más relevantes del mes fue el aumento en la media diaria de embarques, que llegó a 16.700 toneladas por día, frente a las 12.000 toneladas diarias del año anterior. Este ritmo sostenido de envíos ratifica la capacidad logística del sector exportador brasileño, que supo adaptarse rápidamente a la demanda internacional.

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Posición estratégica en el mercado mundial

El desempeño exportador de noviembre reafirma a Brasil como una potencia global indiscutida en el comercio de carne bovina. La combinación de alta demanda internacional, precios competitivos y eficiencia logística coloca al país en una situación privilegiada para seguir ganando espacio en mercados estratégicos.

China sigue siendo el principal motor de las compras, pero también crecieron los despachos hacia Oriente Medio y la Unión Europea, regiones que están ampliando sus compras ante la menor disponibilidad de carne proveniente de Oceanía y Estados Unidos. Según analistas sectoriales, esta coyuntura externa favorable, sumada a la capacidad industrial brasileña, ofrece un “escenario único” para consolidar el liderazgo del país en 2025.

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Perspectivas: cierre de año con proyección histórica

Con los datos de noviembre, todo indica que 2025 podría convertirse en uno de los mejores años de la industria cárnica brasileña. La tendencia alcista en volumen y precios sostiene las proyecciones de crecimiento y abre la puerta a nuevas inversiones en frigoríficos, logística y tecnología aplicada a la producción.

Si se mantienen los niveles actuales de demanda internacional y competitividad interna, Brasil podría no solo superar sus propios récords, sino también ampliar su participación dentro de un mercado global cada vez más exigente y dinámico.