Brangus argentino: la raza que más semen exporta en Sudamérica

La raza Brangus se consolidó en los últimos años como la principal exportadora de semen bovino en la Argentina, superando incluso al histórico liderazgo del Angus. Su expansión en Sudamérica, especialmente en regiones tropicales y subtropicales, se apoya en una combinación de factores normativos, genéticos y estratégicos que hicieron del Brangus argentino un modelo de referencia regional.
En diálogo con Valor Carne, el ingeniero agrónomo Mauricio Groppo, presidente de la Asociación Argentina de Brangus, explicó cómo se logró este posicionamiento y cuáles son los próximos desafíos de la raza sintética, surgida del cruce entre el Angus británico y razas cebuínas como el Brahman o Nelore
Según Groppo, uno de los principales obstáculos que limitaba el crecimiento del Brangus fue, históricamente, la existencia de múltiples grados de sangre (media sangre, tres octavos, cinco octavos, etc.), lo que dificultaba la uniformidad fenotípica y la valoración comercial. Esto cambió en 1996, cuando la Asociación Argentina de Brangus suprimió las restricciones por porcentaje de sangre cebuína, permitiendo que los criadores seleccionaran el genotipo más adecuado según su ambiente.
“Ese cambio fue estratégico. Permitió que el productor optara por un animal más británico para zonas templadas o uno más acebuzado para ambientes duros, sin ser penalizado en la cadena comercial”, destacó Groppo.

Brangus: una raza para el trópico y el subtrópico
El Brangus se volvió clave para la expansión ganadera en zonas cálidas con pastos de bajo costo, donde las razas británicas puras no prosperan. Groppo explicó que esa versatilidad abrió las puertas del mercado sudamericano, en especial en países como Brasil y Paraguay, donde la cría bovina se desarrolla en zonas subtropicales y tropicales.
“En Brasil, que ya es el mayor exportador mundial de carne, el crecimiento se dio sobre todo en regiones tropicales. Pero para avanzar en calidad, están recurriendo a cruzamientos con razas británicas. Por eso usan tanto semen Angus y Brangus. Se inseminan entre 10 y 12 millones de vacas por año, y eso empuja la demanda de genética argentina”, detalló.
En 2018, el Brangus lideró por primera vez las exportaciones de semen bovino desde Argentina, con casi 487.000 dosis, el 49,5 % del total de razas de carne. En 2024, ese porcentaje creció hasta alcanzar el 56 %, con Brasil como principal comprador.
En cuanto a embriones, si bien no existen estadísticas oficiales desagregadas por raza, la Asociación estima que el Brangus también lidera. “El Angus tiene un mercado más limitado, mientras que nuestra raza está habilitada en todos los países de Latinoamérica, donde se valora la adaptabilidad del Brangus a distintos ambientes”, subrayó Groppo.

Empresas globales y estrategia regional
Un factor clave fue la llegada de grandes compañías internacionales de genética al país. Según Groppo, estas firmas instalaron centros de producción en Argentina por la calidad de sus reproductores y los menores costos logísticos. “Compran reproductores a criadores locales, producen semen aquí y lo colocan en Brasil. Así armaron un negocio muy eficiente”, explicó.
El caso paraguayo también ilustra este crecimiento, donde el Brangus lidera la faena gracias al desarrollo ganadero impulsado por inversores extranjeros y una trazabilidad que incluye la identificación racial.

Países como Perú, con vastas áreas selváticas aún no explotadas ganaderamente, también empiezan a mirar al Brangus como una alternativa viable para desarrollar sistemas sustentables de cría. En ese sentido, la Asociación Argentina trabaja en nuevas líneas genéticas para responder a los desafíos del trópico: resistencia al calor, garrapatas, eficiencia alimentaria y menor impacto ambiental.
“El trópico y el subtrópico todavía no tienen techo en materia de producción de carne. En cambio, en las zonas templadas hay límites agronómicos y económicos. Por eso, la demanda de Brangus va a seguir creciendo”, concluyó Groppo.
Con información de ValorCarne