Boca empató con Central Córdoba y dejó pasar la chance de ser líder
Boca igualó 2-2 ante Central Córdoba de Santiago del Estero en La Bombonera, por la novena fecha del Torneo Clausura, y dejó escapar una oportunidad inmejorable de alcanzar la cima de la Zona A y de la Tabla Anual. El conjunto dirigido por Miguel Ángel Russo ganaba 2-0 con goles de Rodrigo Battaglia y Miguel Merentiel, pero la reacción del Ferroviario llegó a tiempo: José Florentín descontó de cabeza y, a siete minutos del final, Iván Gómez selló el empate definitivo.
El resultado cayó como un balde de agua fría en el público xeneize, que ya se ilusionaba con terminar la jornada en lo más alto de las posiciones. Con este punto, Boca quedó tercero en su grupo con 14 unidades, detrás de Unión (16) y Barracas Central (15). En la Anual, acumula 47 puntos, dos menos que River, el único líder.
La tabla que se le escapó a Boca
Más allá del traspié, Boca sigue bien posicionado en la lucha por los cupos a la Copa Libertadores 2026. En la tabla anual, River lidera con 49 puntos pese a la derrota sufrida en Tucumán frente a Atlético por 2-0. El Xeneize comparte ahora la segunda colocación con Rosario Central, aunque lo supera por diferencia de gol (+19 contra +16).
El equipo azul y oro desperdició la posibilidad de alcanzar al Millonario y liderar junto a él, pero se mantiene en zona de clasificación directa a la fase de grupos. En caso de caer al tercer lugar, debería disputar el repechaje, tal como ocurrió a principios de este año cuando fue eliminado en esa instancia por Alianza Lima, en una definición por penales.
Rosario Central, que igualó con Talleres en Arroyito, también sigue en la pelea. Los rosarinos, además, tienen pendiente completar los 45 minutos del partido suspendido frente a Sarmiento en Junín, lo que puede modificar el panorama en la recta final del Clausura.
El desarrollo del encuentro en La Bombonera
Boca mostró autoridad en la primera parte. Rodrigo Battaglia abrió el marcador y después, ya en el complemento, Miguel Merentiel amplió la diferencia. Con el 2-0, el equipo de Russo parecía encaminarse a un triunfo clave frente a un rival incómodo. Sin embargo, Central Córdoba no bajó los brazos y encontró premio a su insistencia.
José Florentín descontó de cabeza para darle vida al Ferroviario y, cuando faltaban apenas siete minutos para el final, Iván Gómez sorprendió con un potente remate que dejó sin reacción a la defensa local. El 2-2 definitivo silenció a La Bombonera y encendió las alarmas en el banco xeneize, que vio cómo se escapaban dos puntos vitales.
El empate dejó al equipo santiagueño en la cuarta posición de la Zona A, con los mismos 14 puntos que Boca pero con una peor diferencia de gol. Para los dirigidos por Omar De Felippe, el punto significó un impulso anímico y la confirmación de que pueden competir de igual a igual frente a los grandes del fútbol argentino.
Russo asumió la responsabilidad
Tras el empate, Miguel Ángel Russo enfrentó los micrófonos y no dudó en asumir la responsabilidad por el resultado. El entrenador llamó la atención al haber realizado apenas un cambio en todo el partido: el ingreso de Alan Velasco por Brian Aguirre a los 74 minutos.
Consultado sobre por qué no utilizó las restantes modificaciones, Russo fue tajante: “Me hago cargo de todo, es una decisión mía”. El DT explicó que, a su criterio, el equipo estaba bien plantado en la cancha y que los errores cometidos no pasaron por la falta de variantes, sino por no haber sabido manejar los tiempos del encuentro.
“Creo que hicimos un buen partido y en determinados momentos cometimos errores. Nos faltó tranquilidad y manejar las formas. No me voy con bronca, pero era un partido que podíamos ganar. De local hay que hacerlo. Me duele porque lo teníamos acomodado”, señaló.
El entrenador también remarcó que el fútbol argentino presenta desafíos permanentes: “Acá cualquiera te pone tres delanteros y les da lo mismo todo. Si hacés cuatro goles, está bien, y si logran empatar, mejor. Eso fue lo que nos pasó”.
Lo que viene para Boca
Con el empate consumado, Boca deberá enfocarse en lo que resta del Clausura para no perder terreno en la pelea por el título y, sobre todo, en la lucha por asegurarse un lugar en la próxima Copa Libertadores. Los hinchas, que esperaban festejar la cima, se fueron con un sabor amargo, aunque conscientes de que el equipo aún depende de sí mismo.
El camino hacia la clasificación sigue abierto, pero el Xeneize sabe que partidos como el de Central Córdoba, donde tuvo todo a favor y no lo pudo cerrar, pueden marcar la diferencia en la definición del torneo.
