La representación del agro en la Legislatura bonaerense quedó limitada tras las elecciones
Las elecciones legislativas en la provincia de Buenos Aires dejaron al peronismo consolidado como principal fuerza, con más de 13 puntos de ventaja sobre La Libertad Avanza (LLA), y un limitado ingreso de representantes del agro en la Legislatura provincial.
A pesar de la participación de candidatos con formación agronómica y experiencia productiva, la penetración del agro en los nuevos legisladores fue magra, concentrándose solo en algunas secciones estratégicas de la provincia.
Primera y segunda sección: escasa representación del agro
En la primera sección, que incluye municipios del norte y oeste del conurbano como San Martín, Morón y San Isidro, no hubo candidatos con alta referencia al agro en la legislatura. De las ocho bancas de senadores en juego, el peronismo se llevó cinco y LLA tres.
La segunda sección, integrada por parte de la zona núcleo, concentra localidades altamente vinculadas a la producción agrícola. En esta región participaron Ariel Bianchi, ingeniero agrónomo y productor por Potencia, y Guillermo Mac Loughlin, productor y dirigente rural del Partido Libertario. Sin embargo, ninguno logró ingresar: Frente Patria se quedó con cuatro bancas, los libertarios también con cuatro, y Hechos obtuvo tres. Potencia y el Partido Libertario quedaron fuera del reparto.
Tercera y cuarta sección: intentos fallidos del sector agropecuario
La tercera sección, que comprende el conurbano sur con distritos como La Matanza y Quilmes, tuvo 18 diputados en disputa. Participó Santiago Mac Goey, productor agropecuario y concejal de Cañuelas por Potencia, quien terminó séptimo sin lograr bancas. También compitió Javier Prida, empresario avícola de la Alianza Violeta, quien quedó séptimo y estuvo cerca de ingresar. Las bancas se distribuyeron entre el oficialismo con diez diputados, LLA con seis y la izquierda con dos legisladores.
En la cuarta sección, que abarca localidades del noroeste bonaerense como Junín, Chacabuco y Lincoln, la candidata del agro en la legislatura fue Andrea Passerini, tambera de Carlos Casares por Potencia. Salió cuarta y no consiguió representación en la Legislatura.
Quinta y sexta sección: algunas victorias aisladas
En la quinta sección, con ciudades como Mar del Plata y Tandil, a pesar de su vinculación con la ganadería y la producción de papa, no hubo candidatos del agro en la legislatura que lograran ingresar a las cinco bancas de senadores.
En cambio, en la sexta sección, donde se disputaron 11 diputados, hubo éxito parcial para la representación del agro en la legislatura: Andrés De Leo, productor ganadero de Bahía Blanca por la lista Somos Buenos, logró ingresar. Su alianza obtuvo dos bancas, mientras que LLA se quedó con cinco y el peronismo con cuatro.
Séptima y octava sección: el agro en la legislatura, sin representación
La séptima sección, que incluye distritos como Olavarría, Azul y Bolívar, contó con la participación de Pedro Vigneau, productor y expresidente de Aapresid por Potencia. De las tres bancas de senadores en disputa, el peronismo se llevó las tres, y Vigneau quedó cuarto con poco más del 4% de los votos.
En la octava sección, con epicentro en La Plata, se presentó Jorge Metz, vinculado a la agroindustria pero más ligado a los puertos que a la producción primaria. Metz finalizó octavo y no consiguió ninguna de las seis bancas en juego. De esta manera, la representación del agro en la legislatura bonaerense quedó diezmada.
Conclusión: el agro en la legislatura, con mínima presencia
De esta manera, el agro en la Legislatura bonaerense no logró penetrar con fuerza. Los pocos candidatos ligados al sector que participaron enfrentaron dificultades para ingresar, en parte por la fuerza de las grandes alianzas, y en parte por la dispersión de las listas de partidos menores como Potencia o Alianza Violeta.
Si bien hubo algunas bancas aisladas, principalmente en la sexta sección, el resultado general evidencia que el agro en la legislatura tendrá escasa representación política directa en la provincia más poblada del país. Esto plantea un desafío para las organizaciones agropecuarias que buscan influir en la legislación y las políticas productivas en los próximos años.
La elección deja claro que, aunque el sector rural sigue siendo clave para la economía provincial y nacional, la participación del agro en la legislatura bonaerense sigue siendo limitada, concentrándose en pocas secciones y sin lograr ingresar a la mayoría de los distritos con relevancia agroindustrial.
