Agricultura regenerativa: Aapresid lanza una nueva certificación

En un contexto de la agricultura donde los consumidores, las empresas y los mercados internacionales demandan cada vez más trazabilidad ambiental y social en los alimentos y materias primas que producen el agro, la Asociación Argentina de Productores en Siembra Directa (Aapresid) presentó una nueva herramienta de validación para quienes apuestan a una producción con impacto positivo. Se trata de Ambiente Regenerativo Certificado (ARC), un nuevo sello diseñado para reconocer a los productores que aplican prácticas regenerativas y desean acreditar sus acciones ante terceros.
Los detalles de la certificación para la agricultura regenerativa
La iniciativa para la agricultura no reemplaza a la ya consolidada Agricultura Sustentable Certificada (ASC), sino que viene a complementar ese camino de mejora continua impulsado por Aapresid desde hace años. Según precisaron desde la organización, la certificación ARC pone el foco especialmente en la regeneración ambiental, la reducción de la Huella de Carbono y el cumplimiento de estándares internacionales que exigen prácticas alineadas con el cuidado del ambiente y el desarrollo sostenible.

“ASC sigue siendo nuestra certificación estrella”, explicó Rocío Belda, referente del área de certificaciones de Aapresid. “No sólo impulsa la aplicación de prácticas sustentables, sino que inicia a las empresas agropecuarias en un proceso de mejora continua al brindar herramientas para optimizar la gestión productiva y la eficiencia de cada proceso de campo”, agregó. En la actualidad, el sello ASC cuenta con más de 130.000 hectáreas certificadas en 45 firmas a lo largo del país, y ha sido reconocido por organismos internacionales como el International Trade Center (ITC), la European Feed Manufacturers Federation (FEFAC) y estándares como RTRS para soja.
Sin embargo, ARC responde a una necesidad específica: la de aquellos productores que ya transitan un modelo de agricultura regenerativa y que necesitan validar y visibilizar estas prácticas para acceder a mercados diferenciados, con requisitos como medición de Huella de Carbono, prácticas de no deforestación y manejo ambiental responsable.

Entre los principales diferenciales de esta nueva certificación se destaca la entrega de un informe de diagnóstico personalizado, que posiciona al productor en relación con los promedios zonales en variables clave como captura de carbono, eficiencia en el uso de agua, rendimientos, entre otros aspectos. Además, este informe incluye recomendaciones de mejora para seguir avanzando hacia un modelo de producción más eficiente y sustentable.
La obtención del sello ARC es un proceso ágil que se realiza en dos pasos. En primer lugar, los productores deben completar un formulario de inscripción y reunir una serie de documentos como análisis de suelos, plan de rotación de cultivos, detalle de insumos aplicados e imágenes satelitales del lote. Una vez que la información es verificada por el equipo técnico de Aapresid, se emite el informe diagnóstico junto con el sello ARC. Adicionalmente, y de forma opcional, se puede tramitar la certificación de Huella de Carbono.

El certificado tiene una validez anual y está pensado para adaptarse a los ciclos productivos de los sistemas agrícolas. Además, busca incentivar una mayor transparencia y trazabilidad en las cadenas agroindustriales, brindando respaldo técnico y credibilidad a las prácticas que muchos productores ya realizan pero que hasta ahora no contaban con un reconocimiento formal.
En un escenario donde la diferenciación ambiental puede convertirse en una ventaja competitiva concreta, ARC aparece como una herramienta estratégica para los productores argentinos que buscan posicionarse en el mapa global de la sostenibilidad. Y para Aapresid, representa una nueva forma de seguir liderando los procesos de transformación del agro argentino hacia un modelo más regenerativo, productivo y sustentable.