AFA: transferencias por USD 42 millones a sociedades “fantasma” de Estados Unidos
Una investigación periodística difundida por Infobae reveló que la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) transfirió al menos USD 42 millones a sociedades consideradas “fantasma” en los Estados Unidos, en el marco de una compleja operatoria financiera internacional. Las compañías receptoras carecen de empleados, no registran actividad comercial y están vinculadas a titulares sin antecedentes empresariales acordes al manejo de semejantes sumas. El esquema dificulta reconstruir el destino final de los fondos y la identidad de sus verdaderos beneficiarios.
Las transferencias forman parte de un circuito más amplio que, entre 2021 y 2024, canalizó más de USD 260 millones a través de cuentas bancarias en Estados Unidos y otros países. La falta de transparencia y la escasa información reflejada en los balances oficiales presentados ante la Inspección General de Justicia (IGJ) abrieron una zona gris que ya genera cuestionamientos dentro y fuera del ámbito deportivo.
TourProdEnter LLC, el eje de la estructura
El corazón de este entramado es TourProdEnter LLC, una sociedad creada en Florida en agosto de 2021 que, pocos meses después, fue designada agente comercial exclusivo de la AFA en el exterior. El contrato, aprobado por el comité ejecutivo encabezado por Claudio “Chiqui” Tapia, le otorgó la responsabilidad de cobrar ingresos por sponsorización, derechos televisivos y partidos amistosos, realizar pagos y luego transferir los excedentes a la AFA.
Según registros bancarios confidenciales, la firma movió más de USD 260 millones a través de cuentas en entidades como Bank of America, Synovus, Citibank y JP Morgan. Solo en Bank of America, los movimientos alcanzaron los USD 146 millones, lo que posiciona a TourProdEnter como una pieza clave en la administración de fondos internacionales del fútbol argentino.
Sponsors, intermediarios y flujos difíciles de rastrear
Gran parte de los ingresos gestionados por TourProdEnter provino de empresas vinculadas a la Selección Argentina, entre ellas Adidas, que transfirió USD 78,6 millones. También aparecen Argentina Football Distribution, responsable de AFA Play, y Reporter Broadcasting Company. Sin embargo, no todo el dinero tuvo como destino actividades directamente asociadas a la AFA.
Una porción significativa, cercana a USD 110 millones, fue enviada a Adcap Uruguay Agente de Valores, que actuó como intermediario financiero en operaciones de compra y venta de bonos. Estas transacciones involucraron pasos por jurisdicciones como Uruguay, las Islas Vírgenes Británicas y Argentina, lo que agregó complejidad a la trazabilidad de los fondos.
Desde Adcap Uruguay aseguraron que todas las operaciones se realizaron dentro del marco legal, con respaldo documental, y que el dinero regresó a cuentas de la AFA en Argentina tras la liquidación de bonos. No obstante, en los balances oficiales solo se menciona a TourProdEnter como deudora, sin detallar su rol central en la estructura internacional.
Las sociedades fantasma y sus titulares
La investigación detectó que USD 42 millones de la AFA terminaron en cuatro sociedades radicadas en Florida: Soagu Services LLC, Marmasch LLC, Velp LLC y Velpasalt LLC. Ninguna registra empleados ni actividad comercial, y sus direcciones corresponden a servicios de oficinas virtuales en Miami, sin presencia física comprobable.
Los titulares de estas firmas residen en Bariloche, Argentina, y presentan perfiles llamativos: beneficiarios de planes de vivienda social, empleados en pequeños comercios y personas con deudas relevantes o antecedentes de quiebra. Entre ellos figura Javier Alejandro Ojeda Jara, vinculado a Soagu Services, y Mariela Marisa Schmalz, titular de Marmasch, ambos con antecedentes financieros negativos. Un caso similar es el de Roberto Salice, asociado a Velpasalt, quien fue declarado en quiebra en 2019 bajo sospecha de fraude.
Balances incompletos y dudas persistentes
En junio de 2024, los balances de la AFA presentados ante la IGJ incluyeron por primera vez a TourProdEnter LLC como deudora, con un saldo equivalente a USD 14,5 millones. El documento fue aprobado en una asamblea presidida por Tapia, quien destacó el “fair play financiero” y la mejora de ingresos tras el Mundial de Qatar.
Sin embargo, la falta de desagregación previa y la omisión de datos clave dificultan reconstruir el flujo real de fondos. Incluso se detectó que una de las LLC receptoras, Velp, recibió transferencias después de haber sido oficialmente disuelta, un dato que profundiza las sospechas.
Aunque desde la AFA justifican la operatoria internacional como una respuesta al cepo cambiario, la ausencia de transparencia sobre los beneficiarios finales mantiene abiertos los interrogantes sobre la integridad y el control del sistema financiero que rodea a la entidad madre del fútbol argentino.
